La Guardia Civil detiene en Cuenca a 23 personas de una red que traficaba con droga en pueblos de La Mancha

CUENCA, 22 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Guardia Civil de Cuenca ha detenido a 23 personas en la denominada "Operación Cruce", contra una organización que traficaba con droga y operaba en distintas localidades de la Mancha conquense, entre ellas Las Mesas, Las Pedroñeras y Mota del Cuervo.

En rueda de prensa, el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Máximo Díaz-Cano, aseguró que también se desmantelaron otros grupos que operaban en las localidades toledanas de Lillo y Corral de Almaguer.

Todos los detenidos eran de nacionalidad española y entre ellos hay tanto hombres como mujeres, en su mayoría jóvenes, a los que se han incautado cerca de un kilo de cocaína, 400 de marihuana y algo menos de cristal y hachís.

Díaz-Cano subrayó que se trataba de una organización que actuaba en el entorno de los centros de ocio nocturno, y principalmente vendía drogas, sobre todo cocaína, a los jóvenes.

El delegado destacó que no se descartan nuevas detenciones una vez se vayan conociendo las ramificaciones de estos grupos en otros lugares, y señaló que la forma de actuar de esta organización contemplaba "comprar la droga en Madrid, y a partir de ahí hay un escalón superior en el que se sigue trabajando, en colaboración con las Unidades Centrales de la Guardia Civil en Madrid, para ver dónde conduce".

"Lo que se ha desmantelado son los escalones intermedio y último, es decir, el que trafica con la droga y los consumidores, en este caso toxicómanos. Hay un escalón superior, que es el que introduce la droga en el país, que se sigue investigando", explicó.

La investigación se inició en el mes de junio y culminó el pasado fin de semana. La primera detención fue la de una persona en Mota del Cuervo, cuando regresaba de efectuar una compra de cocaína en Madrid, lo que desencadenó más detenciones en Las Pedroñeras o El Provencio, así como en Alcorcón (Madrid).

Entre los objetos intervenidos había sustancias adulterantes, básculas de precisión y otros efectos para distribuir y adulterar drogas ilegales, 30.000 euros en efectivo, cinco vehículos y 29 teléfonos móviles, uno de los cuales comenzó a sonar a los pocos minutos de comenzar la intervención de Díaz-Cano ante los medios.