GIJÓN, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía trasladaron hoy a Comisaría a un padre de uno de los alumnos del colegio Cabueñes, tras recibir una denuncia en el que se le acusaba de haber colocado cadenas en las puertas del centro para impedir la entrada, confirmó a Europa Press su mujer, Mercedes López. La detención se produjo unas horas después de que acudieran al colegio los bomberos y la Policía, tras hallarse encadenado el centro por segundo día consecutivo. Los padres han criticado la actuación policial "desmedida" y anuncian que denunciaran los hechos.
López indicó que su marido aún continúa en la Comisaría de Gijón declarando. Asimismo, rechazó que hubiera motivo para la actuación "totalmente desmesurada" de la Policía, quien, según ella, ya que cuando llegaron los bomberos ya habían cortado dos de las tres cadenas. Según ella, los agentes le indicaron que habían recibido orden del Comisario. La mujer recordó que allí eran muchos los niños que había.
También adelantó que esperan que el colegio se pronuncie al respecto y anunció que estudiarán legalmente la forma de denunciar los hechos. López indicó que cuentan con fotografías y un vídeo de la actuación policial de esta mañana. "Lo tenemos todo debidamente documentado", dijo.
Con respecto a la detención de este padre, la Policía ha citado a declarar a dos profesoras del centro que se encontraban en el interior del colegio cuando acudieron los bomberos y la Policía. También el concejal de Educación, Justo Vilabrille, se desplazó hasta el centro educativo para reunirse con el director del mismo.
Por otro lado, otra de las madres, Alejandra González, explicó a Europa Press que acaba de salir del hospital de Cabueñes, donde le diagnosticaron una luxación de codo derecho. González fue una de las personas que, según ella, cayó al suelo por la actuación policial. Además de ella, en el hospital fue atendida su madre y su hija, que también cayeron al suelo. A su madre le diagnosticaron una pequeña luxación en la pierna derecha mientras que su hija de cinco años sufría una "crisis nerviosa".
González señaló que hubo otras dos niñas que cayeron, pero no resultaron heridas. "Fue más el susto", dijo. Asimismo, adelantó que a continuación, tanto ella como su madre, iban a interponer una denuncia contra la actuación de la Policía.
