SANTANDER, 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
Correos ha emitido un sello y una tarjeta postal dedicados a la Casona Montañesa dentro de la serie Arquitectura Rural. En concreto, una casona enclavada en el municipio de Ruente ilustra el sello que forma parte de un pliego Premium y que comparte emisión junto a la Masía catalana y al silo de cereales castellano.
Mientras que la tarjeta del correo o tarjeta postal prefranqueada, dedicada a las construcciones típicas montañesas, reproduce la conocida como Casona de Ribero en la localidad de Mazcuerras.
Los ayuntamientos de Ruente y de Mazcuernas han acogido este lunes sendas presentaciones de las emisiones filatélicas que han protagonizado este año. A las 11.30 horas, en el Ayuntamiento de Ruente ha tenido lugar la presentación del sello dedicado a la arquitectura montañesa.
En la presentación han tomado parte el alcalde del municipio, Jaime Díaz Villegas, el subdirector de Filatelia de Correos, Modesto Fraguas, y Francisco González, hijo del propietario de la casona que luce en el sello de Correos, una casona que se construyó en 1733 por María Gutiérrez de la Torre Calderón y está habitada.
Por su parte, a las 12.30 horas ha tenido lugar la presentación de la tarjeta del correo también dedicada a esta vivienda rural cántabra tradicional. En esta ocasión es la conocida como Casona de Ribero. Francisco Javier Camino Conde, alcalde de Mazcuerras, y Modesto Fraguas, subdirector de Filatelia, han tomado parte en esta emisión.
En ambas citas se ha procedido al matasellado conmemorativo tanto del timbre como de la tarjeta del correo. La emisión de estos dos productos filatélicos protagonizados por la arquitectura de la región permitirán que el patrimonio montañés se difunda por todo el mundo a través de la red postal.
La casona montañesa es una síntesis entre la casa tradicional montañesa y la palaciega. Incorpora rasgos arquitectónicos y elementos decorativos de diferentes comarcas cántabras, además de los escudos de armas familiares que, en el caso de las emisiones que se presentan hoy también forman parte tanto del sello como de la tarjeta. Hunde sus raíces en los siglos XVII y XVIII, época en que los grandes linajes cántabros se desprendieron de sus actividades militares y se dedicaron a nuevas labores productivas.
Las casonas pueden presentarse aisladas o integradas en los pueblos, suelen tener hastiales que se prolongan en los extremos de la fachada sur o principal, donde se observan la planta baja con soportal de arquerías y la primera con la solana o balcón corrido.
La serie de Arquitectura Rural cuenta con 310.000 ejemplares, su formato es horizontal:74,6 x 28,8 mm. Cada pliego contiene doce sellos, y su valor de franqueo es el de una carta normalizada hasta 20 gramos para Europa. La tarjeta del correo, por su parte, mide: 160 x 110 mm y lleva el sello la casona montañesa por lo que puede utilizarse para cualquier país de Europa. Se han editado 15.000 ejemplares.
