CEUTA, 27 Nov. (EUROPA PRESS) -
La secretaria confederal de Política de Empleo y Migraciones de CCOO, Paloma López, ha denunciado este miércoles que el Ministerio del Interior está negando el derecho a la libre circulación por el territorio nacional a los inmigrantes que logran entrar en Ceuta para "disuadir" a otros indocumentados de intentarlo y ha exigido la retirada de las alambradas con cuchillas instaladas en el perímetro fronterizo de la ciudad autónoma, donde según ha asegurado también se han colocado concertinas nuevas "más o menos recientemente".
López ha comparecido en rueda de prensa tras visitar los dos extremos del perímetro fronterizo local, que según ha lamentado el Gobierno central no le ha permitido conocer íntegramente, y el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), que acoge a más de 700 extranjeros pese a estar fijada su capacidad máxima operativa en 512 plazas.
La sindicalista se ha congratulado por el trabajo que, "pese a la saturación de las instalaciones", realizan los trabajadores del CETI con los acogidos, "a los que aquí sí se da una atención integral". Además, ha aplaudido especialmente la escolarización de los menores que alberga y la atención médica que reciben.
Crítica se ha mostrado, sin embargo, con el hecho de que la estancia media de los inmigrantes en el centro se sitúe en "seis o siete meses". "El Ministerio del Interior debe facilitar la circulación, la salida, de estas personas porque mil inmigrantes en una ciudad como ésta pueden dar la sensación a la población local de que soporta una gran presión migratoria cuando en la Península se diluirían o incluso emprenderían sus procesos de vida en otros países", ha reclamado.
A su juicio, si Interior no facilita que crucen el Estrecho "pese a las recomendaciones del Defensor del Pueblo y las diferentes sentencias judiciales que reclaman que se respete su derecho a la libre circulación" es porque son utilizados para "disuadir a otros inmigrantes de intentar llegar a Ceuta".
La dirigente comisionista también se ha confesado "sorprendida" porque haya "concertinas antiguas, oxidadas y por lo tanto doblemente peligrosas, en la parte más alta de las vallas de Ceuta; y otras nuevas, más o menos recientes, a media altura".
Desde su punto de vista "está demostrado que las cuchillas no tienen un efecto disuasorio y que su único fin es dañar a las personas, algo que va contra la Constitución y contra los Derechos Humanos, por lo que exigimos su retirada inmediata, de las antiguas y de las nuevas". "Lo que hay que hacer", ha contrapuesto, "es potenciar los programas de desarrollo en los países de origen de los migrantes para que su población pueda encontrar en ellos las condiciones de vida adecuadas".
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