LOS ANGELES, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
La comida basura, las chocolatinas y los alimentos altos en colesterol no son saludables, sino que se lo digan a Selena Gómez, que ha confesado que comer mal ha sido la causa fundamental por la que tuvo que ser ingresada el pasado 9 de junio a causa de una desnutrición.
"Me encanta comer M&M, Kit Kat, Snickers y Goobers cuando estoy viendo una película" comentaba la novia de Justin Bieber en el programa de radio de Kidd Kraddick. En su primera entrevista después del susto que vivió ingresando en el hospital dos veces en menos de una semana, la cantante ha señalado qué ha causado su desnutrición: una mala alimentación.
Según ha podido saber 'Hollywood Life', durante las vacaciones que Selena y Justin disfrutaron en Hawai, ambos abusaron de la comida hipercalórica: helados, chocolatinas, tostadas... de todo menos frutas y verduras.
Al conocerse el ingreso de Selena, comenzaron a saltar rumores sobre los motivos que la llevaron a la cama de un hospital: un posible embarazo o incluso un desorden alimenticio ya que ella misma afirmó que acudió al hospital porque estaba "desnutrida, agotada y baja en hierro".
Selena no ha tardado en afirmar: "Yo como. El problema es que no me alimento bien. Me gusta todo lo que no es beneficioso para mí". Este susto ha hecho que la artista haga un ejercicio de autocrítica. "Soy una chica muy testaruda así que tengo que comer todo lo que quiera. Cuando tengo que comer espinacas tienen que ser con bechanel o brócoli con queso. Siempre como algo que haga que lo que tomo no sea saludable".
Según ha podido saber en exclusiva 'Pop Eater', el agotamiento físico ha sido otro de los detonantes de su desnutrición. Pero Selena ya está bien y no ha querido perder la oportunidad de volver a agradecer el apoyo que le ha dado todo el mundo. "Ya estoy bien, gracias. Estoy mucho mejor".
La artista está recuperada y confiesa que gracias a su madre -a la que llama de manera cariñosa 'supermamá'- ha sido todo mucho más fácil. "Ella es la que me da las vitaminas y está encima mía todo el rato".
Selena es un ejemplo de que una mala alimentación tarde o temprano pasa factura. Seguro que después de esto, la estrella elegirá mejor qué comer.
