MADRID, 26 May. (EUROPA PRESS) -
Cleveland Cavaliers y Golden State Warriors disputarán las Finales de la NBA por tercer año consecutivo, después de que el equipo de LeBron James haya vuelto a proclamarse campeón de la Conferencia Este arrasando Boston (102-135) en el quinto encuentro de su eliminatoria contra los Celtics.
El 1 de junio comenzará el tercer capítulo de una rivalidad que ya ha adquirido la categoría de clásico en la NBA, después del anillo conquistado por los Warriors en 2015 (4-2) y la venganza de los Cavaliers el año pasado (4-3).
El arrollador camino hacias las Finales entre ambos equipos se salda con un balance de 24 victorias y una sola derrota. Si Stephen Curry y compañía se mantienen invictos en estos Playoffs (12-0), los 'Cavs' cedieron un partido en la final del Este (12-1), pero se puede considerar un 'accidente' a tenor de lo visto en el último encuentro.
Los vigentes campeones completaron una primera parte para enmarcar en el TD Garden. Anotaron 43 puntos en el primer cuarto y 75 al final de la primera parte, ambos registros marcaron nuevos récords en la historia de la franquicia.
LeBron James, que superó a Michael Jordan como máximo anotador en la historia de los Playoffs, se acercó al 'triple-doble' (35 puntos, 8 rebotes, 8 asistencias), Kyrie Irving (24) y Kevin Love (15 y 11 rebotes) volvieron a secundarle y, como guinda añadida, también se sumó a la fiesta el veterano Deron Williams (14).
Los Celtics, con la baja ya conocida de Isaiah Thomas, se vieron desarbolados desde el pitido inicial y acabaron encajando la derrota más amplia de su historia en los Playoffs. Tan solo Avery Bradley (24) mantuvo el tipo en el mejor equipo del Este en la temporada regular, superado cuando los campeones apretaron de verdad el acelerador.
