EDIZIONES, 2 Dic.
¿Te ha pasado alguna vez que te pones a buscar las llaves, por ejemplo, y después de buscar y buscar te coges con ellas en la mano? ¿O que estás hablando por el móvil y miras en la mesa para buscarlo? Si, parece tonto, pero esto, o cosas muy parecidas seguro que nos han pasado a todos. Y a este chaval también.
El niño fue a la piscina a nadar y pasar un buen rato. Iba completamente preparado para ello, pero le faltaban las gafas para bucear. O no, ya que las tenía puestas, pero en la cabeza. Pero cuando fue a darse el primer chapuzón, sintió que no las tenía y que las había dejado en alguna parte. ¿Dónde están? El chico las busca y le dice a su madre que necesita las gafas. Ella, atónita, sacó el móvil para grabar la escena. A pesar de que le da pistas para que el chico las encuentre, al pobre le cuesta darse cuenta. Imposible no sonreír...
¡Por fin! Al final, como no podía ser de otra manera, el chico las encontró. Una vez puestas (en los ojos, claro) el niño va directo al agua. Mientras, su madre, se muere de risa. ¡Qué despiste, por favor!
