EDIZIONES, 20 mar.
Dos años tuvieron que pasar para que Amanda Wood, una mujer de 37 años con obesidad, lograra quitarse 70 kilos de encima. Lo hizo por salud, porque estaba harta de encontrarse siempre cansada y también porque estaba cansada de sentirse invisible para los demás. Amanda llegó a pesar 170 kilos.
La mujer comenzó su cambio en otoño de 2015, acudiendo a una nutricionista para que le ayudara a determinar y definir los pasos a seguir para que el cambio que ella estaba dispuesta a hacer fuera efectivo. La profesional le dio tres simples consejos: controlar las porciones y la ingesta de calorías, complementar la dieta con ejercicio y, por último, fijarse objetivos razonables a corto y medio plazo.
"Trato de balancear de la siguiente forma los macronutrientes: 35% de mi ingesta de calorías diarias son carbohidratos, un 25% son grasa y el 40% restante, proteínas", dijo Wood a PopSugar.
Los dos primeros, quizás sean los más conocidos, pero el último es en el que podría estar la clave del éxito. De sobra es conocido que para perder peso no existe una fórmula mágica que un día nos vaya a solucionar el problema, y que el binomio dieta+ejercicio es lo único que funciona. Sin embargo, el factor psicológico, la fuerza de voluntad y el adquirir una disciplina y una rutina también son una parte fundamental para tener éxito.
"3 kilos son mucho más manejables que 90 kilos", explica.
Amanda admite que la clave está en no rendirse jamás y probar hasta dar con la fórmula que mejor le venga a cada uno. Ella, por ejemplo, trató de ir al gimnasio por su cuenta y se dio cuenta de que era incapaz de hacer rutina. Entonces, decidió contratar a un entrenador personal. "Fue una gran inversión. Ahora ir al gimnasio es uno de mis momentos favoritos de la semana".
A 'Mandie' todavía le queda camino, y es consciente de que las fuerzas pueden fallar en cualquier momento. Ante este posible ella misma aconseja: "Sé amable contigo mismo. Nadie es perfecto. Tendrás días en los que quieras rendirte, en los que te salgas de la pista, en donde luches contigo mismo. ¡Es normal! Simplemente no te rindas. Concédete tu capricho y vuelve a la pista con tu próxima comida o tu próximo entrenamiento". Y puntualiza: "No te compares con otras personas. Cada persona es diferente, por lo que no puedes esperar tener los mismos resultados que otra persona. La pérdida de peso es un viaje muy personal y diferente para todos y no hay que desesperarse, concentrándose en la dieta y el ejercicio, lo demás sucederá".
Su recorrido en estos dos años, está íntegramente documentado en su cuenta personal de Instagram.
