MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Asociación de Líneas Aéreas (ALA) reclama a Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) la finalización del conflicto con el colectivo de los controladores aéreos "ya que es la responsable de la gestión de la navegación y de los aeropuertos", señaló la asociación en un comunicado.
"Nos preocupa la gestión de los recursos humanos aplicada por AENA, y que un conflicto laboral se prolongue 'sine die', ya que sus efectos son soportados por el último eslabón de la cadena, es decir, las compañías aéreas", destacó la asociación.
"El cierre de los espacios aéreos, la interrupción de la actividad en los aeropuertos, los conflictos laborales, constituyen ejemplos de responsabilidad ante los clientes que todavía no son asumidos más que por las compañías aéreas, y que deberán serlo por AENA, sin perjuicio de que ésta reclame a quien corresponda", recalcó.
ALA señaló que las aerolíneas se han convertido en "rehenes" de una situación que nos lleva a la ruina operacional y económica, tanto por la incidencia que tiene sobre sus operaciones, como por la responsabilidad contractual que mantienen ante sus clientes, "independientemente del servicio que nos ofrezca el gestor".
SOLUCIÓN EQUILIBRADA.
La asociación habla de una solución "equilibrada para todos" y recuerda que "parece ser" que los controladores proyectan medidas de presión para responder a los cambios que sufrió su situación laboral tras la publicación de la nueva ley que regula la prestación de servicios de tránsito aéreo.
ALA cita unas declaraciones de un portavoz del colectivo, que "no deja lugar a dudas" cuando advierte de que "la gente está dispuesta a saltar, porque se nos ha provocado con mucha fuerza".
Dicha provocación según ALA, es del Gobierno, que propuso la Ley, del Parlamento, que la aprobó, y del poder judicial que la confirmó en sus sentencias, por lo que es AENA, la que debe gestionar una negociación "enmarcada obligatoriamente en los preceptos legales, pero también en la viabilidad de un transporte aéreo que debe estar en condiciones de competir internacionalmente".
ALA recuerda que no es una novedad que en las proximidades de épocas de grandes movimientos como verano y Navidad se inicie la campaña de reivindicaciones del colectivo de controladores "que suele enmascararse en conceptos de formación y de seguridad, nunca en retribuciones económicas y en descansos".
No obstante, resalta que el propio consejero delegado de la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) se refería hace unos días al conflicto de los controladores aéreos españoles como un "auténtico escándalo en Europa" por su alta remuneración y por su baja productividad.
"Bisignani apoyaba sus afirmaciones en datos objetivos y lo hacía desde una perspectiva neutral, lejos del fragor de las discusiones y de las tensiones que llevamos viviendo durante los últimos meses", destacó la asociación.
"Nos preocupa la gestión de los recursos humanos aplicada por AENA, y que un conflicto laboral se prolongue 'sine die', ya que sus efectos son soportados por el último eslabón de la cadena, es decir, las compañías aéreas", concluyó la asociación.
