PALMA DE MALLORCA, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
La sociedad española "sigue necesitando" actualmente la incorporación al mercado laboral de otros 100.000 trabajadores inmigrantes procedentes de países extracomunitarios, y con alta cualificación profesional, para que "siga en su estado de bienestar", especialmente en sectores como la Sanidad, según manifestó hoy la secretaria federal de Integración y Convivencia del PSOE, Bernarda Jiménez.
Según indicó la socialista, de origen dominicano y médica de profesión, en un encuentro con los medios de comunicación celebrado en Palma de Mallorca, a donde acudió para dar a conocer las políticas en materia de inmigración del partido socialista, "es más fácil" traer a ese personal desde países Sudamericanos, o aquellos con los que España mantenga un convenio bilateral de convalidación.
Jiménez justificó estas afirmaciones en el hecho de que la demanda de médicos y otros perfiles profesionales de este sector se ha incrementado por la llegada de inmigrantes, y porque muchos facultativos se han trasladado a otros países para desarrollar su actividad. Por lo que reclamó que se les den facilidades legales para no tener que realizar su actividad "como curanderos", incidió.
Y, a este respecto, recordó que desde el PSOE se trata de agilizar las convalidaciones de los facultativos extracomunitarios que desean ejercer la medicina en España, un proceso que debe comenzar meses antes del traslado físico de la persona en su país de origen, desde donde los profesionales interesados deben empezar a remitir la documentación necesaria para que su acogida se realice con todas las garantías.
Respecto a otros perfiles laborales también representados, Bernarda Jiménez explicó que los inmigrantes que venían trabajando en la Construcción y que ahora están en el paro, "se están formando" y, por otra parte, señaló que estos ciudadanos tienen una "mayor facilidad" para trasladarse a otros lugares, porque "están incómodos sin trabajar, aunque tengan la prestación social", señaló.
Por otra parte, la socialista consideró la nueva Directiva Europea de Inmigración una legislación "positiva", y "lo digo como inmigrante también", precisó; afirmación que justificó en que "es un acuerdo de mínimos para avanzar lo máximo" en que los ciudadanos extranjeros que residen en Europa tengan los mismos derechos que el resto de la población, expuso.
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