MADRID, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Policía Nacional del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas han aprehendido casi una tonelada de cocaína en todo el año 2.014. Además han arrestado a 364 personas en un total de 339 intervenciones, las cuales pretendían introducir este tipo de sustancia u otras en España, tales como heroína o ketamina.
Así lo ha revelado hoy la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, y el jefe Superior de Policía, Alfonso Fernández Díez, que han presentado esta mañana en rueda de prensa el balance de actuaciones de la Policía Nacional en el aeropuerto madrileño el año pasado.
Las incautaciones efectuadas el año pasado, vienen a sumarse a las realizadas en 2012 y 2013, acumulándose en los tres últimos años una cantidad superior a tres toneladas, concretamente 3.200 kilos, con un balance global de 1.152 detenidos.
Tanto en 2012, como en 2013 y 2014, la mayor cantidad decomisada en el aeropuerto corresponde a cocaína. Esta tendencia se mantiene también en el período transcurrido de 2.015, en el que ha incautado ya 179 kilos de estupefacientes, de los que 175 lo son de cocaína y 5 de heroína. Se han efectuado ya 69 detenciones, han detallado.
La todavía delegada del Gobierno también ha indicado que durante estos años ha conseguido alguno de los sus objetivos, como es la destrucción de 53 toneladas de droga requisadas por el juez y que antes permanecían durante meses e incluso años guardadas esperando una orden judicial de destrucción. Unos almacenamientos que incluso han sido objeto de robos.
También se ha alegrado por la bajada de las infracciones penales relacionadas con las drogas en los últimos años. Por ejemplo, en 2014 las faltas y los delitos sobre sustancias estupefeciantes bajaron en Madrid un 7,9 y cifras similares los años anteriores.
'VUELOS CALIENTES' Y FORMAS DE OCULTACIÓN
Cinco son los países en los que habitualmente llega la droga en los denominados vuelos calientes. Colombia, Ecuador, Bolivia, Perú y Brasil son los países de origen en los que los narcotraficantes fijan su atención para captar a personas que utilizarán como 'mula' para transportar la droga.
Normalmente, cada persona transporta alrededor de un kilo de sustancia estupefaciente camuflada de múltiples maneras y que trata de esquivar cualquier tipo de control policial. Prácticamente una media de un detenido diario es localizado por los agentes.
Varias y sorprendentes son las situaciones que han llamado la atención de la Policía a la hora de localizar a los delincuentes con sustancias estupefacientes. Aunque la forma de transporte más habitual son los denominados 'boleros', que ingieren múltiples cápsulas en su organismo con el consiguiente riesgo para su vida, o en equipajes de mano o facturados, otros prefieren adosarlas a su cuerpo.
En muchos de los casos 'las mulas' incluso viajan con niños menores para intentar pasar más desapercibidas en los controles policiales. Según ha explicado la Policía, entre dos y ocho horas antes de volar estas personas ingieren las cápsulas, que suelen llegar a 60, y que enmascaran en envoltorios negros.
Cuando llegan a España, una vez que son detectados por los agentes, les piden voluntariamente pasar por una radiografía y, en caso de negarse, le piden una orden al e. Normalmente, se trata de personas sudamericanas pero cada vez hay más españoles. De hecho, los nacionales cobran más (unos 6.000 por viaje) mientras que los sudamericanos cobran menos (3.000)
Sin embargo, el ingenio lleva a los extremos de ocultar la droga de maneras muy poco convencionales tales como 'adosados' en cualquier parte del cuerpo o incluso metidas en prótesis mamarias. En 2014 se logró detectar así una introducción de 1,6 kilos de cocaína líquida una en Madrid y hubo otra intervención en el aeropuerto de Barcelona.
También se ha detectado droga en envoltorios cosidos al propio pelo y a la vez ocultos bajo una peluca, tablas de 'snowboard' fabricadas íntegramente con cocaína, impregnada en ropa, en zapatos, en doble fondo de maletas, diluidas en bebida o comida, en dobles fondos practicados en latas de comida o de forma pastosa en botes cosméticos.
Los agentes de la comisaría del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, pertenecientes a la Jefatura Superior de Policía de Madrid, también han detectado la llegada de heroína, que hasta ahora no solía entrar por esta vía. El año pasado se requisaron diez kilos de esta droga procedentes de rutas asiáticas.
