Junta estudia un nuevo modelo de gestión hídrica para el arroz, que les asegure "recursos fijos"

ISLA MAYOR (SEVILLA), 16 (EUROPA PRESS)

La consejera de Agricultura y Pesca, Clara Aguilera, comunicó hoy al sector arrocero que se han iniciado los contactos con la Agencia Andaluza del Agua, entidad dependiente de la Consejería de Medio Ambiente, para emprender un "ambicioso" proyecto, dirigido a la puesta en marcha de un nuevo modelo de gestión hídrica en este cultivo.

Aguilera informó sobre la necesidad de estabilizar los aportes de agua disponibles para los arroceros, y evitar así su "fuerte" dependencia del recurso hídrico y "las fuertes" variaciones en la cantidad de agua, que ya en las tres campañas anteriores han provocado importantes descensos en la superficie sembrada, en concreto del 25 por ciento hace tres años y del 50 por ciento en los dos últimos. Si bien, este año los arroceros sevillanos han podido sembrar el cien por cien de la superficie (36.000 hectáreas) y prevén una calidad "extraordinaria".

La titular de Agricultura destacó la colaboración constante con la Agencia Andaluza del Agua para encontrar las fórmulas que permitan la ejecución de importantes obras hidráulicas, que podrían estar cofinanciadas por la Unión Europea (UE), hasta el punto de que Aguilera señaló que su realización "va ligada a la obtención de partidas de los Fondos Europeos de Desarrollo Regional (Feder), ya que son proyectos de "gran envergadura económica", que requiere una inversión pública "importante".

Así se refirió a la "incertidumbre" de la Federación de Arroceros de Sevilla (FAS) ante la dependencia que sufre por la falta de agua por el Guadalquivir y por su alta salinidad. En este sentido, el presidente de FAS, Julián Borja, destacó que "sin agua, no hay continuidad ni inversión".

En cuanto a los problemas de salinidad del agua del Guadalquivir para el arroz, el director gerente de la FAS, Manuel Cano, detalló que este año el nivel de salinidad alcanzó el 7,44 gramos por litro y el año pasado llegó a los 5,32 gramos por litro, algo que es "un absoluto descalabro".

PAGO ÚNICO

En su encuentro con la Federación de Arroceros de Sevilla, Aguilera también recordó el compromiso de la Junta para solicitar al Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) que no tenga en cuenta 2007 y 2008 como años de referencia para la aplicación del pago único a partir de 2010, ya que estos años son los de "máxima sequía y menor siembra y producción" en Andalucía, lo que supone pérdidas de valor de unos seis millones de euros anuales.

Aguilera llamó la atención sobre la "dificultad" de este cambio, ya que "el resto de comunidades están de acuerdo con los años de aplicación" porque en esas campañas al no poder sembrar Sevilla el cien por cien de su superficie, otras comunidades --como Extremadura-- pudieron sembrar más y, por tanto, beneficiarse.

"Es una situación claramente injusta y el Ministerio debería reconocer la situación especial del arroz en esos años", subrayó la titular del ramo, a lo que añadió que "si hubiera alianzas entre otras comunidades sería mejor, pero Andalucía está bastante sola".

Al respecto, el director gerente de la FAS, Manuel Cano, consideró una "incongruencia" tomar como refencia para el desacoplamiento los años 2007-2008 y apuntó que el MARM tomó la decisión de forma "ajena a la realidad del campo".

PRODUCTOS FITOSANITARIOS

Por otra parte, los arroceros recibieron el compromiso de la consejera de Agricultura de emprender todas las gestiones oportunas con el objetivo de garantizar la disponibilidad en el mercado de nuevos productos que combatan las plagas del arroz, después de que los más utilizados fueran retirados, en la campaña anterior, por decisión de la Unión Europea.

"Se han quitado productos eficaces y no hay alternativas y aunque estamos de acuerdo en que se eliminen los productos más agresivos con el medio ambiente, siempre tiene que haber en el mercado las alternativas porque sin alternativas el agricultor no puede tratar los cultivos", subrayó.

SIEGA

Durante dicha reunión, la titular de Agricultura tuvo, asimismo, la oportunidad de conocer de primera mano la aplicación informática Siega, validada e implantada por dicha federación y que ofrece innumerables posibilidades de colaboración con la Administración y otros agentes en el entorno de las Entidades de Asesoramiento.

Dirigida a los profesionales agrarios, entidades de asesoramiento, Asociaciones de Producción Integrada (API) y certificadoras, la aplicación Siega, desarrollada por una empresa participada por la Federación de Empresas Cooperativas Agrarias Andaluzas (Faeca), Asaja, Caja Rural del Sur y dos empresas tecnológicas, se ha basado en la aplicación Triana, creada por la Dirección General de la Producción Agrícola y Ganadera de la Consejería de Agricultura para la gestión de explotaciones agrícolas bajo Producción Integrada.

Esta aplicación está pensada para asesorar sobre los requisitos de la Condicionalidad, y se integra con el Programa de la Declaración de la Política Agraria Común (PAC). Otra ventaja de la herramienta Siega es que es multicultivo y multiusuario, con una única base de datos y con acceso a través del Navegador Web, actualizada en tiempo real a la normativa vigente y a la situación de los cultivos, y con un servicio de atención y de mantenimiento para sus usuarios.

AYUDA PARA UN NUEVO MOLINO

Tras su encuentro con el sector, la consejera de Agricultura aprovechó para visitar las nuevas instalaciones para el blanqueado y envasado de arroz de Arrozúa, cooperativa de primer grado, resultado de la fusión de Veta la Mora S. Coop. And., y Unión Arrocera de Isla Mayor S. Coop. And.

Tal y como se contempla en el Plan Estratégico del Arroz y en su línea de apoyo a proyectos empresariales, y en especial a iniciativas conjuntas de las cooperativas para la industrialización y comercialización, la Consejería de Agricultura ha subvencionado el 30 por ciento del nuevo molino de Arrozúa S. Coop. And.

Estas instalaciones suponen un avance significativo, teniendo en cuenta que el sector arrocero andaluz, concentrado mayoritariamente en la provincia de Sevilla, con doce cooperativas y cuatro Sociedades Agrarias de Transformación (SAT), apenas envasa, teniendo todavía una alta dependencia de la industria.

Las nuevas instalaciones de la cooperativa Arrozúa ocupan una parcela de 10.000 metros cuadrados, con espacio disponible para futuras ampliaciones, y se distribuyen entre una nave de 2.448 metros cuadrados para el molino, y 1.500 metros cuadrados para almacenamiento.

La capacidad del molino blanqueado es de 48.000 toneladas de arroz "cargo" al año y se estima que su producción estará en las 18.000 toneladas de arroz blanco y 6.000 toneladas de subproductos al año, que equivalen a un 25 por ciento de la producción total de los socios. En años próximos, se prevé duplicar la producción para alcanzar su máxima capacidad y absorber toda la producción de sus arroceros.

Otros de sus productos son el arroz cáscara, cascarilla de arroz, arroz mediano, partidos y el salvado. Además, se contempla la comercialización de arroz vaporizado, mediante acuerdo con otra cooperativa --se envasará en paquetes que van del medio kilo hasta bolsas de gran tamaño, 1.000 kilogramos, o más--.