Almería.-Cajamar calcula que 11.400 hectáreas de cultivo en Almería se basaron en la lucha biológica la pasada campaña

Los costes de producción experimentaron una subida cercana al cinco por ciento, siendo el más afectado el gasto corriente

Europa Press Andalucía
Actualizado: viernes, 28 noviembre 2008 17:29

ALMERÍA, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Cajamar destacó hoy la "adaptación" del campo almeriense durante la última campaña hortícola a los métodos de lucha biológica ya que la entidad calcula que unas 11.400 hectáreas de cultivo de berenjena, pepino y pimiento fueron tratadas siguiendo técnicas de cultivo basadas en el uso de "depredadores naturales".

Así se refleja en el informe de campaña 2007/2008 realizado por la Fundación Cajamar que fue presentado hoy en el marco de la feria Expo-Agro que se celebra hasta mañana en el Palacio de Congresos y Exposiciones de Aguadulce, Roquetas de Mar (Almería), y en el que también dice que los mercados de destino "han valorado muy positivamente" la disminución en el uso de productos químicos, con lo que se han evitado incidencias.

Del mismo modo, en el análisis de la campaña realizado por la Fundación Cajamar se destaca el comportamiento "ejemplar" de la industria auxiliar por saber investigar y producir en Almería gran parte de la fauna de depredadores naturales, necesarios para el control de plagas.

La producción en la campaña hortofrutícola 2007/2008 en Almería aumentó respecto a la anterior hasta situarse en 2,95 millones de toneladas, lo que supuso un 3,89 por ciento de aumento. El valor de la producción alcanzó los 1.463 millones de euros, una cifra ligeramente superior a la de la campaña 2006/2007.

La agricultura almeriense representa el 18 por ciento de la producción final agraria de Andalucía. De este modo, el 55,4 por ciento de la producción almeriense se destinó a la exportación, lo que supuso un ocho por ciento más, según el informe. Desde una perspectiva de conjunto, la campaña hortofrutícola 2007/2008 fue "normal" tanto en cantidades como en precios.

Los costes de producción, especialmente los gastos corrientes, aumentaron un 4,68 por ciento mientras que los de amortización subieron un 0,2 por ciento, produciéndose la mayor alza en los fertilizantes, que costaron un 40 por ciento más. El análisis determinó que esta subida de precios llevó a muchos agricultores a utilizar compost, "no sin dificultades en su adquisición". El plástico, por su parte, costó un 7,5 por ciento más por el aumento de la demanda de petróleo y la incorporación al consumo de países emergentes.

Pese a que no se han producido problemas con el abastecimiento de agua de riego, el agricultor buscó "mayor eficiencia", ya que el precio del líquido aumentó un 4,2 por ciento. Aún así, el aprovisionamiento esencial procedió de acuíferos naturales y, en el levante almeriense, de las desaladoras.

PRODUCTOS

En cuanto a productos, el pimiento fue el que obtuvo mejores precios respecto a la campaña anterior, con una cotización media de 80 céntimos el kilo, casi un 40 por ciento más. La berenjena también mejoró de forma notable su precio medio. Por el contrario, el tomate bajó su cotización de forma acusada desde el mes de enero y terminó la campaña con un descenso de valor del 12,4 por ciento y un aumento en la producción del siete por ciento. No obstante, este producto supuso el 36 por ciento de los cultivos, con casi un millón de toneladas de producción.

En cuanto a comercio exterior, la Fundación Cajamar observa que Alemania importó un 25,4 por ciento más de producto almeriense mientras que Francia y Holanda disminuyeron ligeramente las compras y el Reino Unido se mantuvo en los niveles de la campaña anterior. El tomate, el pimiento y el pepino fueron los tres productos más demandados en el exterior, aunque el mayor aumento en volumen de exportación fue para la sandía y el melón, con un 20 por ciento, y el valor más elevado lo obtuvieron el pimiento y la berenjena.

El estudio también calificó de "relevante" la labor de la Interprofesional Andaluza de Frutas y Hortalizas, Hortyfruta, quien trabajó para conseguir la unificación de criterios y actitudes frente a los problemas del campo. En cuanto al transporte, el informe plantea que, a medio plazo, el sector deberá buscar alternativas al transporte convencional por carretera que sean "menos costosas e igual de flexibles que el camión".

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