Publicado 26/02/2016 09:58

San Felipe Neri acoge desde este viernes la exposición temporal 'El Gran Capitán'

Cartel de la exposición temporal 'El Gran Capitán'
EUROPA PRESS/MUSEO DEL EJÉRCITO

CÓRDOBA, 26 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Oratorio de San Felipe Neri, en la capital cordobesa acoge desde este viernes la exposición temporal titulada 'El Gran Capitán', organizada por el Museo del Ejército para conmemorar el quinto centenario de la muerte de Gonzalo Fernández de Córdoba, conocido en España y en el resto de Europa como el Gran Capitán.

La exposición, que fue inaugurada este jueves en un acto presidido por el director del Instituto de Historia y Cultura Militar, el general de División José Carlos de la Fuente Chacón, acompañado por el general comandante militar de Córdoba y Jaén, Antonio Ruiz Olmos, y por el general director del Museo del Ejercito, Juan Valentín-Gamazo de Cárdenas, permanecerá abierta al público hasta el 24 de abril, en horario de mañana (de 11,00 a 14,00 horas) y en horario de tarde (de 17,30 a 20,30 horas) de lunes a sábado, y los domingos solo en horario de mañana, y se puede visitar de manera gratuita.

La muestra, según ha informado el Museo del Ejército, se ha organizado con una doble finalidad, por una parte dar a conocer al visitante y a la sociedad un personaje que jugó un papel decisivo en la Historia de España al servicio de los Reyes Católicos, y por otra rendirle un merecido homenaje.

Sus aportaciones al arte de la guerra, que evidenciaron sus victorias contra los ejércitos franceses y otomano, muy superiores en número y armamento, tuvieron una repercusión fundamental en la Historia de España y fueron la base de lo que posteriormente sería los Tercios españoles, que combatirían por Europa durante casi 200 años.

En la exposición, que se organiza en bloques temáticos (El personaje, la Guerra de Granada, las campañas de Italia y el mito) incluye algunas piezas destacadas, principalmente las relacionadas con la captura de Boabdil en la batalla de Lucena (1483), de un valor histórico y técnico extraordinario, además de armamento de la época, armas blancas y artillería, procedentes de los fondos del Museo del Ejército y de la Real Armería.

También se pueden ver retratos prestados por el Museo del Prado, el Museo de Zaragoza, la Casa de los Tiros de Granada y el Alcázar de Segovia. Parte de estas piezas son reproducciones de las originales, ya que éstas que no se han podido exponer por las exigencia técnicas que precisa su exhibición.

Es de destacar, por su valor histórico, el fondo documental prestado por los Duques de Maqueda, integrado por documentos cartas inéditas entre Fernando el Católico y el propio Gran Capitán. Se ha llevado a cabo una labor de restauración, trascripción y catalogación de estos documentos, extrayéndose una información extraordinaria, por su rareza y desconocimiento.

El discurso expositivo está basado en estos fondos y en la representación de imágenes y gráficos que puedan proporcionar información sobre el Gran Capitán, las figuras históricas con las que se relacionó y los hechos históricos de los que fue protagonista.

EL PERIODO HISTÓRICO

El periodo en el que vivió Gonzalo Fernández de Córdoba, sede su nacimiento (1453) en Montilla (Córdoba) y hasta su muerte (1515) en Loja (Granada) fue uno de los más complejos y decisivos de la Historia de España, dedicando su vida al servicio de los Reyes Católicos, que configurarían la transición de la Edad Media al Renacimiento y el nacimiento de España, como primer estado moderno en Europa.

Este periodo de la historia viene marcado por la finalización de la Guerra de los Cien Años, con la configuración de Francia como potencia europea, las guerras de sucesión a la Corona de Castilla y la conquista de Granada por los Reyes Católicos.

Las luchas con Francia en Italia, para la defensa del Reino de Nápoles, y el enfrentamiento con los turcos, para frenar la expansión del Imperio Otomano hacia Occidente, serían consecuencias lógicas de esta situación, y en las mismas fue destacado el protagonismo de el Gran Capitán, aunque fue mucho antes, en la Batalla de la Albuera (24 de febrero 1479), en la Guerra de Sucesión de Castilla, cuando se produjo su bautismo de fuego y donde Gonzalo Fernández de Córdoba ya destacó por su valentía y destreza con las armas.