Nueve de cada diez ahorradores nunca contraste la información de la empresa donde invierten con otras fuentes

Actualizado: lunes, 21 febrero 2011 21:20

SEVILLA, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -

Casi nueve de cada diez ahorradores nunca han contrastado la información que les facilita la entidad con otras fuentes, como la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) o las asociaciones de consumidores, a raíz de la crisis de Nueva Rumasa, "que ha dejado a pequeños ahorradores en una crítica situación y ha puesto una vez más en evidencia la desprotección del consumidor y las consecuencias de una deficiente formación financiera por parte de los mismos".

Según ha indicado la asociación de consumidores Al-Andalus en una nota, en el estudio 'Conocimiento, uso y percepción de los productos de ahorro e inversión por los consumidores españoles', realizado por Ceaccu, Confederación en la que se integra la Federación Andaluza de Consumidores y Amas de Casa Al Andalus a nivel nacional, se ponía en evidencia que "la fuente de información más influyente en la elección y contratación de un producto es la propia entidad financiera o emisor", al tiempo que "la posibilidad de que el cliente reciba la información sobre los contratos y cláusulas con tiempo para revisarla antes de firmar, es casi excepcional; sucede en menos del 30 por ciento de los casos".

Además, según revelaba este informe "casi nueve de cada diez ahorradores nunca han contrastado la información que les facilita la entidad con otras fuentes, como la CNMV o las asociaciones de consumidores".

Para contribuir a prevenir estas situaciones, e informar sobre cómo invertir con garantías, la Federación Andaluza de Consumidores y Amas de Casa, Al Andalus, puso en marcha en 2010 una campaña sobre productos financieros cuyo principal soporte fue la 'Guía Práctica sobre productos financieros: Información, Ahorro e Inversión'.

Entre otras recomendaciones, Al Andalus destaca que es imprescindible que el consumidor, antes de elegir cualquier modalidad de inversión, siga una serie de pasos, como "comprobar que la entidad se encuentra entre las autorizadas por la CNMV, pues, en caso contrario, el consumidor debe saber que no está sometida a las normas y control de esta entidad, ni al régimen del Fondo de Garantías de Depósitos y que, con frecuencia, su funcionamiento es temporal y además, tienden a ejercer grandes presiones sobre el ahorrador para forzar la inversión".

Además, recomienda "informarse sobre el producto de ahorro o inversión, para lo cual el consumidor debe 'exigir saber' una serie de cuestiones, como si se trata de un producto complejo o no complejo, sus costes, el riesgo, si el capital está garantizado o no y en qué plazo, la rentabilidad del producto, si la inversión es líquida o no es líquida y bajo qué condiciones".

Al Andalus recomienda "evaluar su situación personal y financiera, así como los objetivos que persigue con la inversión y mantenerse firme en los mismos; desconfiar de las recomendaciones y buscar información y asesoramiento independiente y externo". Ha apuntado que "además de recurrir a las asociaciones de consumidores, se recomienda visitar las webs de la CNMV y el Banco de España, que incluyen secciones con consejos, información sobre entidades de interés para accionistas y advertencias sobre inversiones poco seguras".

"Hay que ser consciente de las obligaciones que se asumen, según impone la normativa vigente, en la contratación de cualquier producto de ahorro o inversión; una responsabilidad que limita, en gran medida, las posibilidades de reclamación del usuario", ha agregado.