Innova.- El consumo de energía en la región crece por primera vez por debajo del PIB, con dos puntos menos

Actualizado: martes, 8 julio 2008 16:03

Salgueiro apuesta porque el aumento de los precios del combustible supondrá un "estímulo" para ser "más eficientes"

SEVILLA, 8 Jul. (EUROPA PRESS) -

El consumo de energía se desacopla del crecimiento económico en Andalucía y por primera vez crece menos que el Producto Interior Bruto (PIB), dos puntos porcentuales por debajo, según el 'Informe de Sostenibilidad en Andalucía 2008', realizado por la Escuela de Negocios EOI y el Observatorio Ambiental de Andalucía.

De este modo, el informe revela que el consumo de energía final por sectores disminuyó en 2006 un 1,71 por ciento, mientras que el PIB creció un 3,9 por ciento. Así, la intensidad energética final decreció en 2006 un 5,4 por ciento, "obteniendo un mayor crecimiento económico con la energía consumida en las actividades productivas", según el presidente del Observatorio, Fernando Martínez Salcedo.

Igualmente, el documento recoge que el consumo energético procedente del carbón cayó un 34,5 por ciento, al igual que el de energías renovables, con un -20,4 por ciento, y el gas natural, con un -8,4 por ciento. El consumo de energía eléctrica y de petróleo experimentaron una subida del 1,6 por ciento y del 0,5 por ciento, respectivamente.

También, destaca un descenso del consumo de energía por parte de la población en 2006 (-0,8 por ciento) y de energía final por habitante (-3,2 por ciento), además de la bajada de la producción de residuos peligrosos (-3,4 por ciento).

Por sectores, Martínez salcedo indicó que el sector transporte, la industria y el residencial son los "grandes consumidores", con un 38,6; un 32,7; y un 12,7 por ciento del consumo, respectivamente. En este sentido "se rompe el crecimiento habitual del consumo de energía por sectores", especialmente en el transporte (3,5 por ciento) y residencial (1,9 por ciento). Además, decrece en la industria (-8,6 por ciento) y agricultura y pesca (-3 por ciento), manteniéndose estable en el sector servicios (0,4 por ciento).

MAYOR PRESIÓN AMBIENTAL EN TRANSPORTE Y TURISMO.

El informe subraya que las presiones ambientales de los sectores de transportes y turismo siguen aumentando por encima de su aportación económica, como en años anteriores, "aunque se percibe una leve mejoría".

Así, en cuanto al turismo, creció el consumo de energía final atribuible (4,3 por ciento), la generación de residuos urbanos (9,2 por ciento) y el consumo de agua (10,5 por ciento), debido, en parte, a el incremento de turistas (17,8 por ciento) y de pernoctaciones (5,37 por ciento).

Los datos del transporte se ven influenciados por el aumento del tráfico en la red de carreteras (cuatro por ciento), lo que supone un crecimiento del consumo final de energía (3,6 por ciento) y en la densidad de los medios de transporte (1,9 por ciento). Además, constató un "ligero descenso" en el empleo del transporte público, tanto urbano como por carretera, además de en ferrocarril.

Por contra, destacó el comportamiento de sectores como el agrícola, que a pesar del aumento del crecimiento económico, aminora la presión medioambiental. Así, se ha reducido el consumo de fertilizantes (-8,1 por ciento) y un incremento de productos fitosanitarios, con un dos por ciento. Además, se ha aumentado la superficie para agricultura ecológica (28,9 por ciento) y de producción integrada (58,8 por ciento).

Asimismo, mencionó el descenso de la producción industrial y su disminución de la presión ambiental en relación con el consumo de energía (-8,7 por ciento).

Por último, apuntó a una disminución de acoplamiento en la construcción entre su crecimiento y su consumo energético. Además, el consumo de cemento bajó un 4,4 por ciento y el de áridos un 1,5 por ciento. Sin embargo, el consumo de suelo creció un 27,9 por ciento.

IMPUESTOS ECOLOGICOS Y LIMITACIÓN URBANÍSTICA.

El informe revela que la situación de la Comunidad, en cuanto a la sostenibilidad, es de "práctico mantenimiento", además de constatar "una leve disminución respecto al índice anterior", pasando del 1,02 al 1,007.

Entre las tendencias, destacó que la población andaluza es "cada día más favorable" a la incorporación de impuestos ecológicos en las actividades de mayor incidencia, a aplicar medidas de ahorro de energía, y a la eliminación de residuos del sector industrial.

Los expertos consultados marcan como retos el respecto de las medidas que limitan la expansión urbanística, el desarrollo de modelos eficaces de transporte público y la reducción del consumo de agua en el sector agrícola, entre otros.

EL PRECIO DEL COMBUSTIBLE COMO ESTÍMULO.

Por su parte, el secretario general del Observatorio, Rafael Salgueiro, destacó que el aumento de los precios del combustible supone un "estímulo" para la Administración, el sector empresarial y los ciudadanos para establecer medidas para ser "más eficientes".

En este sentido, Salgueiro insistió en que es "necesario" el establecimiento de un mayor número de mecanismos para reducir el consumo energético.

En el mismo sentido, Martínez Salcedo subrayó que en el periodo presente se producirá una menor presión ambiental como consecuencia del descenso de producción, lo que "no implica ser más sostenibles", algo que relacionó con el equilibrio entre ambas circunstancias.