MARBELLA (MÁLAGA), 8 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente del comité de empresa de Portillo y representante de los trabajadores, José Bautista, aseguró hoy que la huelga continúa con carácter indefinido y que la compañía "sigue sin querer sentarse a negociar".
En este sentido, indicó que existen servicios mínimos, pero "únicamente salen aquellos que reúnen las condiciones necesarias", ya que, según apuntó, "muchos coches no tienen las características exigidas y la empresa debe ponerlos a punto".
Asimismo, recordó a los periodistas que "llevamos ocho meses intentando resolver el problema del convenio colectivo y hemos llegado a esta situación porque la empresa se ha levantado y no quiere seguir negociando".
Finalmente, Bautista insistió en que nadie del "equipo de gobierno de Marbella se ha puesto en contacto con nosotros todavía; únicamente concejales de la oposición, del PSOE y de IU han estado aquí con nosotros, preocupándose por nuestra situación".
CTSA PORTILLO
Por su parte, CTSA Portillo solicitó hoy a las autoridades competentes que garanticen el cumplimiento de los servicios mínimos establecidos durante el tiempo que duren los paros y que la Consejería de Empleo fijó en un 25 por ciento.
Asimismo, aseguró que la "normalidad", en este sentido, es la nota predominante, aunque reconoció se han producido incidentes en zonas concretas como Marbella, donde los piquetes "han actuado con contundencia, con pedradas y rotura de lunas, y han evitado el cumplimiento de dichos servicios mínimos".
La compañía reiteró, en un comunicado, que "hay un preacuerdo, aceptado por el comité de empresa y que fue ratificado el pasado 13 de junio en el Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales (Sercla), con importantes avances y mejoras laborales y sociales".
Por ello, desde la empresa consideraron que "los paros no tienen ningún sentido y van a perjudicar a usuarios, trabajadores y compañía, en el marco de la situación general actual". Además, opinaron que las peticiones de los trabajadores "son desproporcionadas, con incrementos salariales inviables del 15 por ciento, combinados con una reducción importante de la productividad".
