SEVILLA, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
El portavoz parlamentario de Ciudadanos (Cs), Sergio Romero, ha considerado este miércoles que el portavoz de Hacienda del Grupo Socialista y delegado de Universidades del PSOE-A, Antonio Ramírez de Arellano, ha denunciado que el Gobierno andaluz está dispuesto a despedir a 9.000 empleados públicos porque "estará preocupado por algún amiguete", toda vez que ha asegurado que el Ejecutivo que comparten el PP-A y la fuerza naranja "no va a echar a nadie".
"Es legítimo que cada uno se preocupe por sus amiguetes pero la Junta lo que hace, sin complejos ni temblor de pulso, es evaluar la mastodóntica administración paralela que montó el PSOE-A", ha afirmado Romero en rueda de prensa en el Parlamento y a preguntas de los periodistas.
De este modo, ha explicado que el Gobierno andaluz está auditando los entes instrumentales "de forma serena pero sin pausa" y que el proceso consiste en "analizar, tomar decisiones y mejorar la eficiencia".
Ahora, según ha proseguido Romero, "estamos en un proceso de auditorías y análisis para redimensionar y hacer la administración autonómica más eficiente y ágil, reduciendo todo lo que sobra".
Y así, si bien ha defendido que hay muchos empleados públicos con derechos adquiridos capaces de hacer un trabajo "por Andalucía y no para un partido político", el portavoz de Cs ha concretado que "cuando haya un empleado público de brazos cruzados, lo más lógico será colocarlo donde sea productivo, y esto es lo que hará la Junta".
Con todo, ha garantizado que "no se va a echar a nadie" sino que van a intentar "tener por fin una administración pública mucho más ágil, eficiente, productiva, mejor y que redunde en una mejor calidad de vida de los andaluces", ha zanjado Sergio Romero.
