Juzgado de lo Penal número 4 de Jaén
EUROPA PRESS
Actualizado: domingo, 9 julio 2017 12:16

JAÉN, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -

Un vecino de Jaén, G.M.M., de 33 años, se enfrenta a 20 años de cárcel, por maltratar y vejar a su pareja sentimental durante sus dos años de relación y a la que llegó a rajarle las mejillas con una tijera en plena vía pública para que así dejara de lucir una cara bonita y se acordara de él cada vez que se mirara en un espejo.

Hasta once delitos le imputa el Ministerio Fiscal en su escrito de calificación al que ha accedido Europa Press y que son el reflejo de los poco más de dos años de relación que mantuvieron y de la que nació una hija. Malos tratos, lesiones, amenazas, allanamiento de morada y quebrantamientos de medidas cautelares son los delitos que inicialmente le imputa la Fiscalía.

En el escrito se relata que durante la convivencia, el acusado maltrató y vejó en numerosas ocasiones a su pareja a la que insultaba y amenazaba con rajarle la cara, amenaza que finalmente cumplió.

El 1 de julio de 2015, durante uno de los varios periodos en los que se rompió la relación, el acusado con la excusa de ver a su hija quedó con su ex en una céntrica calle. G.M.M. aprovechó el encuentro para pedirle una nueva oportunidad. El rechazo de su ex le llevó a sacar una tijeras con las que, en presencia de su hija de pocos meses, le rajó ambas mejillas mientras le decía "ya no vas a lucir más cara bonita, que cuando te mires al espejo te vas a acordar para siempre de mí".

Tras la agresión, el acusado se marchó del lugar mientras la víctima tuvo que ser trasladada al Hospital Neurotraumatológico, donde recibió numerosos puntos de sutura en el rostro.

A partir de ese momento, la Fiscalía relata numerosos episodios de violencia de género en los que el acusado se ha servido de cuchillos para volver a amenazar y golpear a su ex a que pedía que no le denunciara porque su adicción a las drogas le ayudaría a una condena menor y mientras tanto su familia iría a por ella y a por sus seres queridos.

Actualmente, el acusado tiene prohibido residir a menor de 20 kilómetros de Jaén capital y lleva una pulsera de control telemático puesta para garantizar el cumplimiento de la medida de alejamiento y la prohibición de comunicarse con su expareja. No obstante, Fiscalía le acusa de tres delitos de quebrantamiento por no usar correctamente 'la pulsera' de control.

Además de las penas de prisión, la Fiscalía le reclama 25 años de prohibición de acercarse y comunicarse con la víctima y también la suspensión de la patria potestad durante cinco años.

El caso está pendiente de señalamiento de fecha de juicio y se verá en el Juzgado de lo Penal número 4 de Jaén encargado de enjuiciar los casos de violencia de género.