JAÉN, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional ha desmantelado un punto negro de venta y consumo de sustancias estupefacientes en Linares (Jaén), deteniendo tras ello a nueve personas, cuatro de las cuales han ingresado en prisión, después de practicarse tres registros domiciliarios donde se encontraron armas de fuego, joyas, electrodomésticos y hasta un zulo con apariencia de bar habilitado para la venta y consumo de droga.
Según informa la Policía en un comunicado de prensa, el grupo estaba perfectamente organizado con las tareas de cada uno de los detenidos definida: captación de consumidores, preparación de sustancias, distribución y venta. De hecho, los domicilios registrados se encontraban a escasos metros de un centro docente y, en uno de ellos, se descubrió el mencionado zulo con estupefacientes.
Así, los investigadores comenzaron sus labores tres meses atrás, justo después de haber desmantelado otro Punto Negro en la misma zona y al mismo clan. Durante el desarrollo de las investigaciones, se pudo observar que el clan tenía varios domicilios que se alternaban para la venta de droga, dificultando así la labor policial. A esto se une la especial distribución y "planimetría de la barriada", que hacían muy difíciles todas las gestiones policiales, ya que se trata de calles peatonales cuyos accesos están estrechamente controlados y vigilados por jóvenes consumidores que eran presuntamente pagados a cambio de sus dosis diarias.
De esta forma, los nueve detenidos se unieron para "trabajar conjuntamente en tareas de captación de clientes, control de presencia policial, elaboración, preparación y venta de droga en cuatro puntos de la barriada", facilitándose así sustancias estupefacientes en el caso en el que alguno de esos puntos se quedara sin suministro "con el fin de evitar la pérdida de clientes y así realizarse la competencia entre ellos, llegando incluso a intercambiarse los domicilios donde se ejercía la actividad ilícita".
Los investigadores pudieron observar el constante trasiego de vehículos y personas de la zona durante los siete días de la semana y las casi 24 horas del día. En cuanto al zulo, los investigadores lo descubrieron en el sótano de una de las viviendas registradas, encontrándose reformado como si se tratara de un bar con su correspondiente barra y repisa, donde se observaron diferentes botes de cristal con sustancias estupefacientes, bebidas alcohólicas y hasta latas de conserva. Todo ello preparado para un total servicio al consumidor.
En una de las paredes, se descubrió un hueco disimulado por unas baldosas que daba acceso a un habitáculo de un metro cuadrado donde, entre bolsas de basura, se encontraba escondido y armado con una pistola uno de los detenidos. Finalmente, en la operación policial han intervenido agentes de Policía Judicial y Seguridad Ciudadana de la Comisaría de Linares y alumnos que se encontraban realizando el curso de especialización de las Unidades de Intervención Policial en el Centro policial de la Enira.
