Imagen de archivo de la toma de tensión a una paciente durante el Día de la enfermedad renal crónica. - JUNTA DE ANDALUCÍA - Archivo
SEVILLA 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un análisis del Registro de Fracaso Renal Agudo-Covid 19 de la Sociedad Española de Nefrología (SEN), desarrollado por nefrólogos españoles, ha concluido que los pacientes con Fracaso Renal Agudo que se han visto afectados por infección de Covid-19, que precisan ingreso en UCI y soporte ventilatorio durante su estancia hospitalaria, presentan una mayor necesidad de someterse a Tratamiento Renal Sustitutivo (TRS), es decir, diálisis o trasplante, para poder sustituir la función de sus riñones.
Señala que los pacientes que precisan Tratamiento Renal Sustitutivo son mayoritariamente hombres, con obesidad, con menor diuresis (excreción de orina) y una elevada respuesta inflamatoria ante la infección por SARS-Cov 2, según ha informado esta sociedad médica por medio de una nota.
El Registro de Fracaso Renal Agudo-Covid 19 de la SEN quiere dar respuesta a muchos interrogantes que han surgido en estos últimos meses respecto a la afectación renal en la infección por SARS-Cov 2.
Este análisis ha pretendido analizar y estudiar la necesidad de Tratamiento Renal Sustitutivo entre los pacientes afectados por infección por Covid-19 que presentaron Fracaso Renal Agudo (FRA).
La iniciativa ha sido realizada por un grupo de trabajo compuesto por profesionales de los servicios de Nefrología de los Hospitales Vall d*Hebron y Clínic de Barcelona, el Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres y el Hospital Universitario Virgen Macarena de Sevilla, utilizando los datos de este registro procedentes de 20 hospitales distribuidos por todo el territorio nacional.
Para el desarrollo de la investigación se compararon las características de los pacientes con Fracaso Renal Agudo y Covid-19 según la necesidad o no de TRS, en base a diferentes variables epidemiológicas, signos y síntomas, clínicas y tratamientos de los pacientes que presentaron FRA.
El estudio, que se ha presentado en el 50 Congreso de la Sociedad Española de Nefrología (SEN) celebrado la semana pasada, analizó los casos de un total de 212 pacientes que desarrollaron Fracaso Renal Agudo durante la hospitalización por coronavirus. De ese total de pacientes, un 56% precisaron Tratamiento Renal Sustitutivo.
Las modalidades terapéuticas utilizadas en nuestro país ante esta situación han sido: 34% terapia renal de reemplazo continuo (CRRT), un 30% precisaron hemodiálisis alterna, un 11,8% hemodiálisis diaria, un 7,5% hemodiálisis expandida y un 5,7% hemodiafiltración.
Los resultados del estudio indicaron que los pacientes precisaron TRS durante un periodo medio de dos semanas, hecho importante a tener en cuenta ya que impacta directamente en la estancia media de los pacientes, pudiendo contribuir a saturar los sistemas sanitarios.
La mayoría de los pacientes que requirieron TRS fueron hombres (76,8,4%), con una edad media de 64 años.
FALLECIMIENTO DE UN 46,5% DE PACIENTES
El estudio también destaca que en los pacientes que necesitaron Tratamiento Renal Sustitutivo se había requerido el uso de contraste yodado en mayor proporción, y, sobre todo, se relacionó con ingreso en unidades UCI y necesidad de soporte ventilatorio.
Este grupo de pacientes presentó una diferencia significativa en cuanto a valores medios de parámetros inflamatorios (PCR e interleucina 6). El estudio también señala que un 24% de los pacientes que precisaron TRS permaneció en diálisis, y que 46,5% fallecieron.
El análisis determina que los pacientes con Fracaso Real Agudo e infección por Covid-19 que necesitaron someterse a Tratamiento Renal Sustitutivo se diferenciaron del resto del grupo en que requirieron ingreso en UCI y soporte ventilatorio con mayor frecuencia.
El perfil identificado es de varones, con edad superior a 60 años, predominando pacientes obesos con marcadores inflamatorios mucho más elevados, un perfil que coincide con el identificado en la población general como de riesgo de mayor gravedad de enfermedad Covid-19 y de necesidades de UCI.
Otras conclusiones destacables de este estudio son la elevada mortalidad de estos pacientes coronavirus con FRA y necesidad de TRS, muy superior a la referida en el resto de pacientes hospitalizados; así como que un importante porcentaje de estos pacientes permanece en TRS.
Los autores del estudio señalan que es necesario esperar la evolución en los próximos meses para evaluar el impacto real que el coronavirus tendrá sobre la prevalencia de la Enfermedad Renal Crónica y la necesidad de Tratamiento Renal Sustitutivo.
CINCUENTA CONGRESO DE LA SEN
Esta investigación se ha presentado en el 50 Congreso Nacional de la Sociedad Española de Nefrología, celebrado del 6 al 9 de noviembre de forma online.
Se trata del mayor encuentro de nefrología y enfermedades renales en nuestro país, en el que han participado 1.500 nefrólogos, expertos e investigadores de España y otros países para poner en común los últimos avances, investigaciones y estrategias para una prevención más eficaz de la Enfermedad Renal Crónica (ERC), así como para la mejora en el tratamiento de los pacientes renales.
La relación de la Covid-19 con las patologías renales y sus consecuencias sobre los pacientes con algún tipo de problema en el riñón, o que tras padecer el virus se han visto afectados por patologías renales, ha centrado una parte importante del debate e intercambio de conocimiento en este encuentro.
El Congreso ha pretendido ser el altavoz para sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de la Enfermedad Renal Crónica, una patología que a pesar de afectar a unos 7 millones de españoles y tener un gran impacto en la expectativa de supervivencia y calidad de vida de los pacientes, sigue siendo una gran desconocida para la mayoría de la opinión pública.
La reunión dedicó gran parte de su programa a tratar los aspectos de actualización y prevención de la ERC, su relación con la diabetes y la hipertensión arterial, el proceso diagnóstico en trasplante renal, el riesgo vascular y renal, la hemodiálisis domiciliaria, la anemia en las enfermedades renales, la diálisis peritoneal, y la glomerulonefritis, entre otras.
Se han desarrollado cursos de actualización sobre Enfermedad Renal Crónica Avanzada y cuidados paliativos, Inteligencia Artificial y Big Data, y enfermedades renales hereditarias; y se han realizado sesiones específicas con pacientes renales y nefrólogos jóvenes.
Se han presentado más de 500 comunicaciones científicas sobre los últimos proyectos y estudios relativos a la enfermedad renal.