SEVILLA, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Sindicato Andaluz de Funcionarios (SAF) ha manifestado este viernes que ya avisó en octubre de 2016, cuando dijo que "no se engañara" a los funcionarios con el decreto que devolvía la jornada de 35 horas a los funcionarios, después de que el Gobierno la subiera a 37,5, porque esta sería una medida que tendría "poco recorrido" y sería "un brindis al sol".
El sindicato se ha pronunciado así a través de un comunicado después de que este viernes el Gobierno haya anunciado que recurrirá ante el Tribunal Constitucional (TC) la normativa de la Junta de Andalucía que permite devolver la jornada laboral de 35 horas semanales a los más de 270.000 trabajadores públicos de la administración autonómica, en vigor desde el pasado mes de enero, y haya acordado solicitar al TC la suspensión cautelar de esta medida.
Así las cosas, el SAF insiste en su comunicado en que ya avisaron que iniciativa de la Junta tendría poco recorrido y era un "brindis al sol" la "decisión unilateral" del gobierno autonómico andaluz de legislar sobre la jornada de trabajo de los funcionarios, "máxime cuando es materia básica del Estado". "El tiempos nos ha dado la razón", añade.
En esta línea, añade que el sindicato ya "alertó" que se estaban "creando falsas expectativas" puesto que otras comunidades autónomas, entre ellas la Comunidad Autónoma Vasca y Castilla la Mancha, había tomado la misma decisión y la Abogacía del Estado había recurrido dichas normas, que fueron más adelante anuladas por el Tribunal Constitucional.
"El SAF denunció que se estaba utilizando a los funcionarios en una confrontación política entre el Gobierno Central y la Junta de Andalucía, como moneda de cambio", afirma el sindicato, al tiempo que dice que también avisó "que la Junta de Andalucía sería la única responsable de esta marcha atrás, puesto que tomó de manera unilateral la decisión de implantar la jornada de 35 horas, a sabiendas que no tenía potestad para hacerlo".
Para el sindicato de los funcionarios, la decisión de implantar de nuevo la jornada de 37.5 horas semanales por parte del Gobierno estatal, fue "desproporcionada" y "un ataque sin precedentes" al colectivo de funcionarios públicos y demás empleados de las administraciones públicas. "Un descrédito al trabajo y profesionalidad de cientos de miles funcionarios españoles, culpándolos directamente de ser unos de los factores de la crisis económica sufrida en estos últimos años. Por no hablar de otros recortes brutales sociales y económicos al mismo colectivo", explican.
Sin embargo, asevera que "el ridículo y esperpento del Gobierno andaluz lo van a pagar decenas de miles de funcionarios en la conciliación de la vida laboral y familiar". "Crónica de una muerte anunciada", concluye el comunicado.
