El 66% de andaluces usaría el DGP en patologías hereditarias y el 80% no prolongaría su vida en situación irreversible

Actualizado: miércoles, 29 octubre 2008 14:52

Montero reconoce que las listas de espera no urgente y el trato a los usuarios son los aspectos a mejorar

SEVILLA, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -

Dos de cada tres andaluces sostiene que haría uso del diagnóstico genético preimplantatorio (DGP) en caso de padecer una enfermedad genético-hereditaria que pudiese transmitir a su descendencia, además de que casi ocho de cada diez encuestados (el 78,9%) afirma que preferiría no prolongar su vida en situación terminal en caso de no disfrutar de la mínima calidad de vida para ello, según se desprende del último Barómetro Sanitario, que como novedad incluye este año la opinión de los ciudadanos en ámbitos como la investigación con células madre y la aplicación de tratamientos en situación terminal.

En rueda de prensa, la consejera de Salud, María Jesús Montero, destacó asimismo la opinión manifestada por casi nueve de cada diez andaluces (el 87,2%) de que en caso de situación irreversible tienen derecho a la aplicación de un tratamiento que mitigue su dolor, aunque ello suponga vivir menos, extremo por el que justificó que "la polémica que algunos sectores nos intentan arrojar --en esta materia-- no tiene eco en la población andaluza".

Precisamente, estos son dos de los aspectos recogidos en el borrador de Ley de Muerte Digna aprobado por el Consejo de Gobierno, donde se regula este derecho "necesario" para el el 93,7 por ciento de los encuestados.

De igual forma, este sondeo desvela que ocho de cada diez andaluces consideran buena o muy buena la posibilidad de registrar el testamento vital, si bien sólo el 21 por ciento de los encuestados conoce en qué consiste este testamento, un aspecto del conocimiento "que hay que mejorar", admitió Montero.

En este mismo ámbito de cuestiones, subrayó que un 75 por ciento de encuestados manifiesta que querría conocer si va a padecer en el futuro alguna enfermedad grave, al tiempo que un 56,3 por ciento afirma que donaría la sangre del cordón umbilical al banco público para beneficio de quien lo necesite, frente a un 23,8 por ciento que lo guardaría sólo para uso propio.

La encuesta, realizada a un total de 2.400 personas de 176 núcleos de población, revela igualmente que el 76,8 por ciento de los encuestados opina que la Administración debe impulsar la investigación con células madre y que casi ocho de cada diez (78,2%) creen que estos trabajos contribuyen a mejorar la salud.

Para la titular del ramo, quien reseñó que este Barómetro Sanitario "nos permite pulsar la percepción de la ciudadanía y detectar las líneas de mejora", la opinión mostrada por los encuestados "nos permite ver que la investigación y los nuevos derechos que llamamos de tercera generación --como el DGP o la Ley de Muerte Digna-- son las dos principales cuestiones en las que tenemos que seguir trabajando y potenciando".

OTRAS VALORACIONES

El último Barómetro Sanitario también ha pulsado la valoración de los andaluces acerca de los tradicionales servicios que presta el Sistema Sanitario Público Andaluz (SSPA), entre ellos, la capacitación de los profesionales, el trato dispensado a los usuarios, la universalidad de las prestaciones sanitarias o la adquisición de nueva tecnología.

Así, y en cuanto a los aspectos mejor valorados, destacan la profesionalidad y capacitación de los profesionales (28%), seguido de la buena atención en los servicios (21%), la universalidad (15%) y la tecnología y medios disponibles (13%).

Además, uno de cada tres andaluces considera que la situación de las listas de espera quirúrgica ha mejorado respecto a 2003, aunque el 11 por ciento afirma que se trata de un área a mejorar en los hospitales.

Sea como fuere, el 70 por ciento de ciudadanos creen que la sanidad pública andaluza es equitativa, es decir, opinan que ofrece los mismos servicios "independientemente del lugar de residencia, ya sea en el medio rural o urbano", frente al 42 por ciento de españoles que a modo global opina que la sanidad española es equitativa.

"En este apartado, la sanidad andaluza se sitúa 28 puntos por encima de la valoración realizada por los ciudadanos a nivel nacional", valoró.

GASTO PÚBLICO

De otro lado, los ciudadanos andaluces prefieren la sanidad como el ámbito prioritario que elegirían para aumentar el gasto público (41%) frente a otras áreas como vivienda (19%), educación (15%), pensiones para personas mayores (12%) o desempleo (6%).

Entre los aspectos que los andaluces mejorarían de la sanidad andaluza se encuentran los tiempos de espera en la atención no urgente, motivo por el que "hay que mejorar este ámbito", confesó Montero. También habría que mejorar, según los encuestados, el trato dispensado a los usuarios, el número de profesionales y alcanzar una mayor intimidad y confort en los centros.

En el apartado referido a la atención sanitaria, los andaluces valoran la atención que reciben en la sanidad pública y consideran que los servicios ofrecidos en los distintos niveles asistenciales han mejorado en lo últimos años y son equitativos.

En concreto, siete de cada diez andaluces (69%) opinan que la sanidad pública andaluza funciona bien o muy bien (mejorando cuatro puntos respecto al anterior barómetro, realizado en 2003) y dos de cada tres dicen estar satisfechos o muy satisfechos con lasanidad pública andaluza, pese a que el 73 por ciento manifiesta que, actualmente, es más exigente con los servicios sanitarios.

SANIDAD PÚBLICA FRENTE A PRIVADA

Además, casi la mitad de la población (48%) cree que la sanidad pública está hoy mejor o mucho mejor que en 2003 por un 12 por ciento que considera que ha empeorado.

En comparación con sanidad privada, este Barómetro pone de manifiesto, que el 84 por ciento de los encuestados afirma que acudiría a un servicio sanitario público en caso de padecer una enfermedad grave (3 puntos más que en 2003 y 8 puntos más que en 1999), mientras que sólo el 8 por ciento acudiría a un servicio privado (tres puntos por debajo de los resultados de 2003).