CÁDIZ/SEVILLA, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -
La autopsia realizada a la persona que falleció el pasado 22 de abril en el Hospital de Jerez (Cádiz) con sospecha de que pudiese haber contraído la nueva variante de la enfermedad de Creutzfeld-Jakob, una patología asociada al mal de las 'vacas locas', ha descartado finalmente que sufriese tal enfermedad.
Fuentes de la Delegación Provincial de Salud consultadas por Europa Press confirmaron así los últimos resultados realizados a esta persona, después de que se enviase una muestra de su masa encefálica al centro de referencia andaluz, situado en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, y tras el requerimiento que en su día elevó un juzgado de guardia de Jerez a petición de la familia del fallecido.
Las mismas fuentes, que indicaron que los resultados definitivos de esta prueba se obtuvieron "hace sólo unos días", recordaron que cuando el pasado mes de enero los servicios clínicos que atendían a esta persona ya detectaron una posible sospecha de encefalopatía espongiforme, se remitió toda la información al registro nacional que existe sobre esta enfermedad.
Una vez remitida esta información, los expertos que manejan este registro ya determinaron por aquel entonces que dicho caso no se tenía que incorporar al citado registro porque la clínica "no se correspondía con el diagnóstico de una encefalopatía", según defendía la propia consejera de Salud, María Jesús Montero
En el caso de que este análisis hubiese dado positivo, es decir, que el paciente tuviese la nueva variante de la enfermedad de Creutzfeld-Jakob, --las otras variantes existentes no tienen vinculación alguna con el mal de las vacas locas--, la muestra se hubiera tenido que remitir al laboratorio de referencia nacional situado en Alcorcón (Madrid), tal y como marca el protocolo a seguir en estos casos.
Una vez en Madrid, dicha muestra pasaría un segundo análisis de confirmación. En caso de que volviese a dar positivo, el casos se notificaría definitivamente al registro europeo, situado en Edimburgo (Escocia), como fallecimiento por mal de las vacas locas.
Los expertos clasifican la enfermedad de Creutzfeld-Jakob, una patología neurológica de las catalogadas raras, en cuatro grandes grupos. Los tres primeros, que no tienen vinculación con el mal de las vacas locas, son la variante esporádica de Creutzfeld-Jakob, de la que no se sabe que lo causa; la variante yatrogénica, que se contrae por un contagio de implantes, y la variante genética, que tiene un origen hereditario.
El cuatro grupo, conocido como nueva variante de Creutzfeld-Jakob, es el que se asocia al mal de la vacas locas por el consumo de carne infectada con priones.
