SEVILLA, 23 May. (EUROPA PRESS) -
CGT, el sindicato mayoritario en el Parlamento de Andalucía desde 1999, ha advertido de que la dirección parlamentaria ha aprovechado "la ola general de recortes" y una Mesa de la Cámara "complaciente" para realizar un "ajuste de cuentas" con los funcionarios de esta institución.
En un comunicado, CGT apunta que los funcionarios del Parlamento de Andalucía han sufrido recortes en sus derechos económicos y laborales como el resto de los trabajadores públicos, unos recortes a los que el sindicato se opone "frontalmente" por suponer "un lavado de imagen de los políticos, eso sí, con el dinero y los derechos de otros".
CGT afirma que en los años 2012 y 2013 los trabajadores de la Cámara han visto recortadas sus retribuciones en un millón de euros (325.000 euros en 2012, 650.000 euros en 2013 y 43.000 euros del fondo de acción social en 2013), mientras que sus señorías, aunque en 2012 no cobraron la extra de navidad, al recuperar esta paga extra este año van a tener un incremento retributivo que llega hasta el 4,25 por ciento para el diputado raso.
Asimismo, este sindicato destaca que, según la página web de la Consejería de Hacienda, el Parlamento de Andalucía a finales del 2012 realizó una modificación presupuestaria detrayendo 654.000 euros de una "partida fantasma" denominada "edificios y otras construcciones" para incrementar la partida de 'Asignaciones a los Grupos Parlamentarios', ya dotados con 10.777.361 euros, para sumar la cifra "nada desdeñable" de 11.427.361 euros.
"Todo ello, teniendo en cuenta que el Parlamento paga prácticamente la totalidad de los gastos posible de los grupos políticos, incluidos los sueldos de los conductores de los portavoces y los coches oficiales que, por cierto, se han renovado el año pasado", afirma CGT, quien mantiene que se está haciendo "un lavado de cara con dinero y derechos ajenos".
En este sentido, el sindicato se pregunta cómo es posible que reduzcan los días de asuntos propios de los funcionarios a la mitad cuando no han tocado ni uno solo de los días de sus tres meses de vacaciones y cómo es posible que se reduzcan también las retribuciones de este personal en 650.000 euros en 2013 "con la excusa que van a sufragar la sanidad y la educación públicas y cuando son los mismos que en 2012 han incrementado en la misma cantidad las asignaciones a sus grupos políticos".
MEDIDAS QUE NO SUPONEN NINGÚN AHORRO ECONÓMICO
De igual modo, CGT señala que muchas de las medidas que se han adoptado "no han supuesto ningún ahorro económico, sino más bien lo contrario". "La justificación real de algunos de los recortes a los derechos de los trabajadores ha sido la determinación de la dirección parlamentaria de acabar con resoluciones que no eran de su agrado porque tenían un claro carácter social y progresivo y ningún beneficio para los altos funcionarios o cuerpo de letrados", añade.
Como ejemplo de ello, el sindicato pone el Fondo Social, que contaba con una distribución inversa a las retribuciones y que se implantó en el Parlamento "aunque contaba con su opinión contraria y gracias a la aportación de políticos de otros tiempos y otro talante como Antonio Romero".
También destacan los representantes sindicales de los funcionarios del Parlamento que en el proceso negociador la transparencia "de la que tanto alardean en sus discursos públicos ha brillado por su ausencia". Según denuncian, se les han denegado documentos y también el uso de la Sala de Prensa para dar a conocer los datos de los recortes y su opinión sobre los mismos.
Además, según señala el sindicato, se ha llegado a abrir una investigación para determinar si había existido una "filtración" en el Servicio de Gestión Económica sobre el dato que damos de la modificación presupuestaria de incremento de la asignación a los grupos políticos.
Finalmente, CGT considera que estas medidas de recortes se han implantado bajo una "cortina de consenso y concertación falsa" porque los políticos integrantes de la Mesa se han apoyado en el acuerdo "con un sindicato afín y cercano a la dirección parlamentaria y con dos tránsfugas de CCOO que se han pasado al "lado oscuro".
