SEVILLA, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
El coordinador general de IULV-CA, Antonio Maíllo, ha recibido este miércoles el alta médica después de que le diagnosticaran en el pasado mes de diciembre un cáncer de estómago que le ha llevado, tras ser intervenido, a recibir durante seis meses ocho ciclos de quimioterapia. El líder andaluz ha dado las gracias a todas las personas que le han apoyado en este proceso, un proceso "del que se sale" para el que "la fuerza mental es fundamental".
En una carta publicada en su perfil de Facebook, recogida por Europa Press, Maíllo ha expresado su gratitud a todas las personas que le han acompañado en este proceso después de que las pruebas de control hayan indicado que "todo ha ido muy bien".
Fue el 5 de diciembre, como ha recordado, cuando inició este proceso, cuando se desvaneció por un cuadro de hemorragia y las pruebas diagnosticaron que padecía un cáncer de estómago: "cáncer, no hay que tener miedo a la palabra", y por el que fue intervenido el 11 de enero de este año. A partir de ahí, inició un proceso de recuperación "donde la paciencia era algo más que una virtud para convertirse en una necesidad".
Ha trasladado su gratitud al personal sanitario que le han atendido, "quienes han convertido en un compromiso de vida su trabajo, complicado en estos tiempos, y tienen la grandeza de superar las dificultades con atención, profesionalidad y mucha, mucha vocación y afecto".
Y también a todas las personas "que me habéis enviado energía tan positiva, con vuestros mensajes de ánimo que contribuían a la cura casi tanto como cada pastilla que tomaba". "No os podéis imaginar el poder curativo de un mensaje para quienes estábamos inmersos en procesos como este. Cada mensaje era como una dosis de cabecitabina sin efectos secundarios, en todo caso, efectos profundamente beneficiosos", ha resaltado.
Señala de la misma manera "las miradas cómplices y positivas de mis compañeras y compañeros pacientes también del Hospital de Día del Virgen del Rocío, porque nuestros ánimos alimentan muchas esperanzas y convicciones de lucha", y ha remarcado su gratitud "al cariño recibido de tanta gente, mucha anónima, y tan diversa en lo político, del Gobierno y de los parlamentarios andaluces; en lo profesional, de periodistas y profesionales de los medios; o social o cultural, "muestra de una sociedad que evidencia rasgos de estar sana aunque a veces parezca enloquecida".
"La andaluza es una sociedad en la que lo emocional nos hace conectar de modo universal y activa mecanismos de solidaridad --y ternura-- infinita. Guardemos y conservemos este patrimonio inmaterial y sanador", reivindica Maíllo en su misiva.
"PURA VIDA"
De la misma manera, ha dedicado palabras a su organización política "por su solidaridad elevada a la potencia más alta, a una militancia acostumbrada a combatir contratiempos y que se hace fuerte y da fuerza en las dificultades". "Seguimos adelante en esta lucha colectiva por un mundo más justo", ha agregado antes de mostrar su agradecimiento también a su equipo de dirección política, "que ha suplido ausencias con la humildad que caracteriza a los grandes".
"Gratitud a los amigos y amigas que en silencio o en encuentros y visitas me han acompañado en todo este tiempo. A mi familia, la de sangre y la acumulada a lo largo de la vida, que forman el mejor patrimonio personal de que pueda disfrutar una persona", ha afirmado antes de mencionar a sus padres, "que con sus 80 años ya superados me acompañaron día a día y hora tras hora en cinco meses de recuperación, los que más cuidado merecían. Sin ellos nada he sido ni nada sería".
Y por último, Antonio Maíllo ha dado ánimos y fuerzas a quienes siguen en el proceso, un proceso "del que se sale" y para el que "la fuerza mental es fundamental". "Pura vida", termina exclamando el líder andaluz de la formación de izquierdas tras recibir el alta médica.
