Sevilla.- Tribunales.- El fiscal pide año y medio para el acusado de agredir a un policía en una protesta de Astilleros

SEVILLA, 23 May. (EUROPA PRESS) -

El ministerio fiscal ha solicitado una pena de año y medio de cárcel para el que fuera presidente del comité de empresa de Astilleros de Sevilla en 2004, I.S.L., al que acusa de un supuesto delito de atentado contra agentes de la autoridad al agredir presuntamente a un inspector del Cuerpo Nacional de Policía en un forcejeo ocurrido durante una manifestación de los trabajadores de la compañía en protesta por el anuncio de cierre de la misma el 2 de julio de dicho año. Se le acusa de haber agredido a un inspector, al que agarró del pecho y golpeó en la cara cuando la Policía impidió a los manifestantes acceder a la SE-30 desde la esclusa del Puerto.

En la vista oral celebrada hoy por el caso en el Juzgado de lo Penal número 2 de Sevilla, que ha quedado visto para sentencia, el acusado negó los hechos, desmintiendo que pegara a ningún agente. Dijo que iba en la cabecera de la manifestación, que se identificó como presidente del comité y que iba hablando por el móvil con el subdelegado del Gobierno en Sevilla, Faustino Valdés, cuando "la Policía nos paró y nos caímos porque los trabajadores de atrás empujaban hacia adelante --a la llegada de los manifestantes a la entrada al puente del V Centenario-- y no sé si agarré a alguien" porque hubo un forcejeo.

Preguntado si vio a alguien que golpeara con un megáfono contra uno de los agentes actuantes, dijo que no, precisando fuentes judiciales que la causa abierta contra el acusado por este hecho quedó archivada, al no poder concretarse quien cometió esta agresión. De hecho, en la vista de hoy prestó declaración el agente afectado por esta acción quien, tras precisar --como sus compañeros-- que impidieron el acceso de los manifestantes a la SE-30 por orden de sus superiores, aseguró que recibió en el casco de seguridad un golpe de un megáfono por parte de un manifestante distinto del acusado.

Con todo, sí dijo que vio cómo el acusado golpeó en el pecho al inspector y que, "cuando fuimos a declarar, tenía la camisa rota". Sobre el golpe del acusado, dijo que podría haber sido un empujón pues "no sé si los de detrás empujaban, pero la primera línea se echó encima". Además, precisó que después se les permitió el acceso a la vía porque así se les ordenó después.

En cuanto al propio inspector lesionado, declaró que se dirigieron al acusado para comunicarle las órdenes recibidas "y no obedeció. Me agarró por el pecho con una mano y con la otra me golpeó en la cara a puño cerrado, no sé con qué intención. Me rompió la camisa y una cadena", concretando que le agredió de pie, desconociendo si después cayó al suelo. Por su parte, otro policía dijo que vio cómo agredían a un compañero con un megáfono, pero que no fue el acusado. También declaró un manifestante, que aseguró que no vio al acusado realizar agresión alguna en ningún momento. "Yo me caí y él --el acusado--, cayó encima mía", relató.

Así las cosas, el fiscal pidió un año y medio de prisión para el procesado por un supuesto delito de lesiones, multa de un mes con cuota diaria de seis euros por una falta de lesiones y el pago de una indemnización de 250 euros en favor de la víctima. Por su parte, la defensa pidió la libre absolución pidiendo el reconocimiento de las atenuantes de dilaciones indebidas --porque el proceso "estuvo paralizado diez meses-- y de reparación del daño, ya que el acusado abonó los daños causados al agente.

La celebración del juicio ha reunido esta mañana ante el edificio de los Juzgados del Prado de Sevilla a numerosos compañeros del acusado, algunos de los cuáles portaban banderas de CC.OO., a los que el acusado dirigió unas palabras al término de la vista.