Sevilla.- Tribunales.- Fiscalía abre una investigación tras los casos de cáncer presuntamente registrados en el Macarena

Actualizado: viernes, 3 octubre 2008 17:30

CSI-CSIF dice que la apertura de diligencias supone que la Fiscalía "habrá visto indicios de que algo ha podido pasar"

SEVILLA, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Fiscalía de Sevilla ha abierto una investigación para esclarecer si ha existido algún delito contra los derechos de los trabajadores del centro de especialidades Esperanza Macarena de la capital hispalense, después de que el sindicato CSI-CSIF elevase una denuncia al Ministerio Público, a fin de que determine si existe una relación 'causa-efecto' entre los casos de cáncer que han aparecido en dicho centro en los últimos años y su vinculación con un posible mal funcionamiento de la sala de rayos X, confirmaron a Europa Press fuentes fiscales.

Así las cosas, el Ministerio Fiscal ha incoado diligencias de investigación para determinar si los acontecimientos denunciados por la central sindical pudieran constituir un delito contra los derechos de los trabajadores, tal y como adelanta en su edición de hoy Diario de Sevilla.

Por su parte, el presidente provincial de CSI-CSIF, Isidoro Ocaña, que el pasado martes ya anunció a Europa Press que los servicios jurídicos del sindicato habían registrado el escrito de denuncia a la Fiscalía, destacó hoy la celeridad con la que el Ministerio Público ha confirmado la apertura de las investigaciones, extremo por el que consideró que "habría visto indicios de que algo ha podido pasar".

"Sólo 48 horas después de interponer la denuncia, la Fiscalía no sólo ha contestado, sino que además ha abierto una investigación del caso", enfatizó Ocaña, quien aludió al hecho de que "al Ministerio Público no le podrán negar toda la documentación que nosotros le hemos solicitado al hospital".

Además, Ocaña resaltó que en el escrito de denuncia que registraron a la Fiscalía "le pedimos que investigue todos los reconocimiento médicos que el centro de especialidades ha realizado a sus trabajadores en los últimos años, así como el listado detallado de las medidas de protección que ha llevado a cabo el centro para evitar riesgos de radiaciones".

"Estas dos cuestiones son esenciales para determinar si existe o no una posible relación causa-efecto", subrayó el dirigente sindical, al tiempo que recalcó que el problema "no está en las mediciones que se han hecho recientemente, sino en lo que ha podido ocurrir en años anteriores".

"CONTRADICCIONES"

De igual modo, aludió a las "muchas contradicciones" que, a su juicio, está incurriendo la Dirección-Gerencia del área hospitalaria Virgen Macarena, que gestiona este centro de especialidades, entre las que citó el hecho de que la formación de los trabajadores de radiología "es en prevención de riesgos biológicos, por lo que no sabemos que tiene que ve esto con las radiaciones ionizantes".

De igual modo, reiteró que en el informe de evaluación de riesgos que le remitió el centro de especialidades, la fecha que aparece "es de 18 de septiembre de este año, el mismo día que nos entregaron la evaluación y pese a que tenía que tener una antigüedad de 12 años, es decir, antes antes de abrir el centro o al menos desde que la ley de prevención de riesgos laborales entró en vigor".

Además, recordó que dicho informe de evaluación "viene sin la firma de ningún técnico, con lo cual ese documento no tiene ningún tipo de validez y denota que lo han hecho para salir del paso", criticó.

SIN FACILITAR EL PLOMADO DE LAS HABITACIONES

De igual modo, Ocaña ya sostuvo a Europa Press que desde la Gerencia del Macarena "tampoco nos facilitan la fecha de cuando se han plomado las habitaciones", un hecho que "hasta el mismo fiscal le ha sorprendido tras presentarle la documentación".

"Es posible que hoy por hoy no existan radiaciones, pero y los casos de cáncer que se han producido con fechas anteriores", se preguntó Ocaña, quien insistió en la necesidad de conocer "cuando se han plomado esos edificios".

De hecho, sostuvo que existe un "documento esencial", que se denomina diario de operaciones, "del que la propia dirección del centro reconoció ante el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) que no lo tenía".

En este diario, precisó, "se tienen que registrar todos los 'disparos', como así se denomina técnicamente, que se producen en las unidades de rayos X, además de la cantidad de dosis que se ha producido en cada 'disparo' y eso no lo tienen", avisó.