Innova.-Un equipo multidisciplinar experto de la UZ trabaja en la creación del primer mapa de radiactividad ambiental

Actualizado: lunes, 15 junio 2009 12:15

ZARAGOZA, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -

Un equipo multidisciplinar de expertos de la Universidad de Zaragoza trabaja en la creación del primer mapa de radiactividad ambiental de Aragón, con el objetivo de conocer si los niveles actuales de radiación podrían provocar algún problema para la salud de los aragoneses.

Según informó el responsable del proyecto, José Angel Villar, en declaraciones a Europa Press, si bien la radiactividad natural es un fenómeno inherente al medio ambiente y no hay lugares exentos de ella, es necesario conocer la posible existencia de puntos de mayor afección.

El nivel de radiactividad varía de un lugar a otro y sufre variaciones con el tiempo. La composición del terreno, la altura sobre el nivel del mar, las condiciones meteorológicas e incluso la actividad solar son factores que determinan su variabilidad.

Además, a la radiactividad natural hay que añadir la inducida por la actividad humana. Ésta incluye la producción y posible difusión al medio ambiente de determinados radioisótopos artificiales y la incorporación de radionúclidos naturales, en concentraciones más elevadas que en su contexto natural, debida a procesos industriales.

El territorio de la Comunidad Autónoma de Aragón es muy extenso y comprende áreas geográficas muy diversas para las que existen numerosos estudios y medidas de parámetros relacionados con el medio ambiente. No existe sin embargo, en la actualidad, ninguna medida ni control sistemático de la radiactividad ambiental.

Otras comunidades autónomas como el País Vasco, Cataluña y Extremadura han desarrollado ya en este contexto redes permanentes de detección automática de la radiactividad ambiental que complementan con la toma de muestras en distintos puntos de interés.

Por otro lado, la detección de una posible variación 'anormal' del nivel de radiactividad en un cierto lugar y momento requiere el conocimiento previo de sus valores habituales y, si es posible, también de su evolución temporal. "Es evidente, por tanto, el interés y la necesidad de disponer de datos de los niveles de radiación, en ausencia de incidencias, en el mayor número posible de emplazamientos", apuntó.

El objetivo del proyecto solicitado en el marco del convenio de colaboración, en materia de sostenibilidad y medio ambiente, entre el Departamento de Ciencia, Tecnología y Universidad del Gobierno de Aragón y la Caixa, es establecer las bases de lo que a largo plazo sería el sistema de monitorización y medida de la radiactividad ambiental en la Comunidad Autónoma de Aragón.

Este sistema debería proporcionar información relevante sobre los niveles de radiación en la atmósfera y en los medios terrestre y acuático con objeto de asegurar que las concentraciones de radionúclidos no constituyen en ningún momento un riesgo para el medio ambiente o la salud de los aragoneses.

Cuando se habla de radiactividad se tiende a pensar, ya sea de forma directa o indirecta, en las centrales nucleares; sin embargo, la radiactividad no sólo procede de las instalaciones nucleares. Existen muchas industrias que en su quehacer cotidiano procesan o utilizan sustancias naturales en cuya composición aparecen isótopos radiactivos. Estos materiales reciben el nombre de materiales NORM -Naturally Occurring Radioactive Materials-, nombre que se extiende a las industrias que los utilizan.

Una industria NORM es aquella que en su proceso de fabricación concentra, generalmente en sus desechos o subproductos, los isótopos radiactivos naturales existentes en las materias primas que utiliza en su proceso industrial.

Por tanto, el medio ambiente en que se encuentran o depositan esos residuos o subproductos puede presentar también una actividad radiactiva que requiera control y, eventualmente, medidas correctoras.

En Aragón existen medio centenar de instalaciones radiactivas, de las que el 70 por ciento están clasificadas como de segunda categoría y el resto de tercera, y no existen centrales nucleares ni actividades relacionadas directamente con el ciclo nuclear, pero tiene relativamente próximas este tipo de instalaciones y por nuestra geografía transitan transportes con material radiactivo que podrían influir eventualmente en los niveles de radiación ambiental.

Dados los escasos datos existentes sobre radiactividad ambiental en Aragón, los expertos han considerado necesario comenzar por una toma selectiva de muestras, en puntos bien definidos, que permitan estimar dichos parámetros generales.

En una primera etapa, que es la que se pretende llevar a cabo con este proyecto, se creará una red básica con un número limitado de puntos de medida, distribuidos por la geografía de Aragón, en los que se tomarán muestras de aire y suelo.

El muestreo se realizará de manera sistemática con una periodicidad semanal, mensual, trimestral o anual, dependiendo del tipo de muestra y los resultados obtenidos serán informatizados en una base de datos.

Finalmente, esta información podrá ser utilizada para realizar estudios posteriores que permitan conocer las concentraciones de radionúclidos, estudiar tendencias temporales o espaciales, o detectar variaciones anormales sobre los niveles de fondo.

En una segunda fase, y una vez analizados los resultados obtenidos en este proyecto, la red se debería ir completando con más puntos de medida y con la realización de análisis más complejos en aquellos lugares que por sus características específicas precisaran de un estudio más detallado.