ZARAGOZA, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Zaragoza licitará la próxima semana los 74 puestos del Mercado Central 'Lanuza', una "joya arquitectónica" de la ciudad que el consistorio rehabilitará con 15 millones de euros, una de las mayores inversiones que se van a realizar en esta legislatura.
El alcalde de la ciudad, Pedro Santisteve, y el consejero municipal de Urbanismo y Sostenibilidad, Pablo Muñoz, han explicado en rueda de prensa las principales líneas de intervención en este edificio. Las obras en el Mercado Central comenzarán en 2018 y, mientras se desarrollen los trabajos, los zaragozanos podrán realizar sus compras en un mercado provisional que se situará junto a las Murallas Romanas, en la plaza de la Iglesia de San Juan de los Panetes.
Santisteve ha subrayado que el Mercado Central es un "motor económico de la zona" y su renovación dinamizará todo el entorno, que desean convertir en el 'Distrito Mercado'. Se mejorará la estructura, los sistemas de agua y calefacción, la movilidad y accesibilidad y también la imagen de este edificio con 114 años de historia.
Seguirá siendo un mercado de abastos, de venta de producto "fresco" y un espacio que potenciará "la huerta zaragozana y el comercio de proximidad". "Estamos contentos y satisfechos de darle un empujón a toda esta zona", ha dicho el alcalde, al señalar que esta actuación formaba parte del programa electoral de Zaragoza en Común.
El consejero municipal de Urbanismo, Pablo Muñoz, ha coincidido en destacar que el Mercado Central es "el buque insignia" de los mercados municipales y, además, es el único Bien de Interés Cultural "que conserva su propio uso".
Con la licitación de los puestos del futuro edificio "damos el pistoletazo de salida" a las actuaciones que se llevarán a cabo y que se diferencian en tres procesos paralelos, ha detallado Muñoz. En primer lugar, se ha redactado el proyecto arquitectónico que se tiene que aprobar y licitar las obras, que comenzarán en 2018, pero "previamente" era necesario instalar un mercado provisional y también conocer quiénes serán los adjudicatarios de los 74 puestos.
Mientras se ejecute la reforma, los nuevos adjudicatarios podrán vender sus productos en un mercado provisional en San Juan de los Panetes, donde se instalarán dos naves con un coste de 1,2 millones de euros. Estará en funcionamiento "a finales de enero", dado que a finales de este año ya se conocerán a los adjudicatarios de los puestos. Muñoz ha precisado que después del verano se licitarán las obras en el edificio histórico.
CONCESIÓN DE 50 AÑOS
La situación actual del Mercado Central es la de una prórroga a precario tras la caducidad de las anteriores licencias en 2016. Algunas de las principales novedades que se prevé que incluya el nuevo pliego de condiciones serán, en primer lugar, que la vigencia de la concesión de los puestos será de 50 años, sin posibilidad de prórroga.
El Mercado Central pasará de los 130 puestos ocupados en la actualidad a 74 puestos: 15 de carnes, 15 de frutas y verduras, 14 de pescados, 8 de pollería, 7 de charcutería, 2 de congelados, 4 de menuceles y 9 de alimentación. Quedan fuera de esta distribución y de este proceso los 4 espacios de restauración con los que contará el edificio, que serán objeto de un proceso de licitación específico, que se llevará a cabo posteriormente.
Se distribuirán en una nave central y dos pasillos laterales que, gracias a la renovación del exterior, podrán verse desde la calle. Será un mercado con puestos más grandes, más innovador y que compatibilizará la venta con el "uso social".
La modalidad concesional que se establece en el pliego de condiciones establece que el proceso se llevará a cabo en dos fases: en primer lugar, una selección de invitados a participar en el proceso de concesión de puestos (con las características específicas que tendrán que reunir también recogidas en el pliego), y, a continuación, la presentación de ofertas más las cláusulas de valoración que se aplicarán, para constituir la lista definitiva de adjudicatarios.
El proceso contempla que, para llevarse a cabo, se exige la presencia mínima de 60 invitados. Cada licitador podrá ser adjudicatario de un máximo de dos puestos, y se generará también una lista de ocupantes expectantes con los que se cubrirán bajas, renuncias o ceses de actividad de puestos. Tendrán 20 días para mostrar su interés y apuntarse al proceso y otros 20 días para presentar sus proyectos.
188 EUROS DE MEDIA AL MES
Como principales obligaciones de los adjudicatarios, el pliego de condiciones establece la realización de una aportación económica única, que será diferente según los puestos y que oscilará entre 70.188 euros y 47.802, siendo la media de 56.447 euros. Esta aportación será de carácter finalista, destinada a sufragar la parte de las obras de remodelación que corresponde a los adjudicatarios de los puestos.
También deberán pagar un canon concesional mensual, que varía según el tipo y las características de cada puesto. La media será de 94 euros al mes. Dado que la concesión es a 50 años, Muñoz ha observado que el coste de los puestos "es asumible" y "razonable" y lo ha cifrado en una media de 188 euros al mes durante el tiempo de la concesión.
Para llevar a cabo la gestión ordinaria y el funcionamiento del Mercado Central, el pliego de condiciones contempla la constitución de una entidad gestora, vinculada a los detallistas, a la que deberán pertenecer obligatoriamente tanto los concesionarios ocupantes de los puestos como los expectantes. Así, se implicarán en la limpieza y mantenimiento de las instalaciones, entre otras obligaciones.
JOYA HISTÓRICA
El edificio, proyectado por el arquitecto turiasonense Félix Navarro y Pérez, se inauguró en 1903, en sustitución del antiguo mercado al aire libre que, desde la Edad Media, se situaba junto a las murallas de la ciudad, en la antigua Puerta de Toledo. Navarro optó por un estilo historicista, adaptado al carácter y función del edificio e incorporando materiales nuevos como el hierro fundido y laminado, combinado con la piedra, ladrilllo, cerámica o esmalte.
Fue declarado Monumento Histórico Artístico de carácter nacional el 10 de febrero de 1978. Reformado en 1982, a instancias de los detallistas, con intervenciones principalmente en la planta calle. La reforma íntegra del sótano se realizó en 2008, para adaptar la actividad agroalimentaria a la normativa de ese momento. El mercado de 'Lanuza' también fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 2002 y forma parte del catálogo de edificios calificados como de Interés Monumental.
El Plan Director para su reforma, elaborado por la sociedad Zaragoza Vivienda, a través de las empresas Ingennus y Baika, planteó una distribución de puestos que potencia un gran pasillo central y unos pasillos laterales que permiten liberar las fachadas y recuperar la imagen primitiva del Mercado, abierto hacia la ciudad, previendo su total cerramiento mediante una caja de vidrio.
La imagen original del histórico mercado también se evocará recuperando el pasillo central y los dos perimetrales. En la planta baja se mantendrá el uso comercial actual, si bien el área destinada a los puestos se reduce, pasando de 1.725 a 1.140 metros cuadrados, pero los puestos ganarán espacio.
Respecto al sótano, dada la actualización realizada en 2008, su práctica totalidad seguirá destinándose a los mismos usos que ahora. Se creará una zona central, accesible para el público desde los ascensores de la puerta Oeste, destinada a área de exposiciones y de formación y comunicación, con dos salas.
Se mantiene la propuesta de peatonalización de la zona Este del Mercado, con una calzada pacificada de acceso restringido. El mercado contará con todas las innovaciones informáticas para facilitar la compra desde casa, a domicilio y las consignas refrigeradas y se instalarán cinco ascensores.
