La Comisión de Ordenación del Territorio de Aragón deberá emitir un informe sobre el posible "trasvase" catalán

ZARAGOZA 1 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Comisión de Ordenación del Territorio de Aragón (COTA) deberá emitir un informe sobre la solicitud formulada por la Agencia Catalana del Agua para realizar un "trasvase" del río Ebro a cuatro municipios de la región vecina, según explicó esta mañana en rueda de prensa el vicepresidente del Gobierno de Aragón, José Ángel Biel.

La Ley de Ordenación del Territorio de Aragón establece en su artículo 48 que se someterá a dictamen del COTA "cualquier propuesta de obra hidráulica o de transferencia de aguas que afecte a su territorio". El plazo que tiene el COTA para emitir este informe es de dos meses.

Así mismo, la Ley de Ordenación y Participación en la Gestión del Agua en Aragón establece en su Disposición Adicional Séptima, que el Plan Hidrológico Nacional y los planes hidrológicos de cuenca que afecten al territorio de Aragón deberán someterse, con carácter previo a su aprobación, a informe preceptivo del Instituto del Agua de Aragón.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, el consejero de Medio Ambiente, Alfredo Boné, recalcó que algunos de los núcleos urbanos para los que se demanda el trasvase están fuera de la demarcación hidrográfica del Ebro. "Eso es un trasvase" y precisamente por eso la CHE ha solicitado un informe preceptivo, dijo el titular de Medio Ambiente, quien añadió que no hay un estudio sobre la necesidad, ni tampoco sobre las alternativas.

"Entendemos la casuística de la solidaridad desde la necesidad de agua de boca, pero no que se tenga que resolver mediante un trasvase", proclamó el consejero, quien subrayó que una hipotética concesión de aguas siempre sería "a precario" y nunca tendría carácter indefinido, a lo que añadió que deberían precisarse los mecanismos de control y concretarse "la idea de reversibilidad", es decir, "que cuando la Agencia Catalana del Agua resuelva sus problemas, que podamos cancelar esa transferencia provisional y a precario".

Alfredo Boné dijo del presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla, que "está mal informado" porque la Agencia Catalana del Agua no ha solicitado una mera transferencia de agua, sino "un trasvase" y remarcó que "eso nadie lo discute".

El vicepresidente José Ángel Biel añadió que "la gravedad de la amenaza de trasvase no viene sólo por el hecho de ser sólo una transferencia de agua, sino por la reacción que también ha producido en otros territorios", en alusión a las declaraciones del vicepresidente tercero de la Generalitat Valenciana, Juan Cotino, quien volvió a pedir un trasvase del Ebro al Levante.

El artículo 72 del Estatuto solo prevé ese informe en caso de que una actuación estatal "afecte" al territorio. El texto estatutario establece que "la Comunidad Autónoma emitirá un informe preceptivo para cualquier propuesta de obra hidráulica o de transferencia de aguas que afecte a su territorio. El Gobierno de España deberá propiciar de forma efectiva el acuerdo entre todas las Comunidades Autónomas que puedan resultar afectadas". El vicepresidente ha destacado que este último punto, el de propiciar un acuerdo entre todas las Comunidades Autónomas implicadas, tampoco se ha cumplido en este caso.

Por su parte, el consejero Boné ha recordado que todavía hay 50 pueblos en Aragón con problemas de suministro de agua de boca, "a pesar de la gran inversión realizada por el Instituto Aragonés del Agua que ha permitido pasar en los últimos años de 180 pueblos con problemas a 50". En este sentido, el Estatuto de Autonomía de Aragón recoge en su disposición adicional quinta la prevalencia del derecho expectante de los usuarios de la cuenca.