CALATAYUD (ZARAGOZA), 29 (EUROPA PRESS)
El Partido Popular de Calatayud ha mostrado hoy su disconformidad con los cambios de horario proyectados por Renfe en la lanzadera que une la ciudad con Zaragoza. El presidente de la Junta Local del PP, José Manuel Aranda, afirma que "pensar que con poner un tren que salga de Zaragoza a las 6.45 horas se solucionan los problemas es no conocer la realidad de los potenciales usuarios de este servicio".
En este sentido, Aranda critica que "no aborden de una vez por todas el problema real, que no es otro que la falta de unidades que realicen el trayecto en ambos sentidos, mientras sigan intentado poner parches la situación no mejorará".
Para el Partido Popular de Calatayud es "totalmente incomprensible la política comercial de Renfe, estamos convencidos que con estos cambios la utilización seguirá siendo escasa, porque una vez más han programado unos horarios totalmente inadecuados, que harán que el servicio continúe siendo deficitario".
José Manuel Aranda explica que Renfe ha programado una lanzadera que llegará a Calatayud a las 7.15 horas, cuando "la mayoría de los potenciales usuarios comienzan a trabajar a las 8.00 horas, con lo que van a llegar tres cuartos de hora antes" a la capital, de modo que este horario "no parece muy apetecible".
En el caso del tren de vuelta a Zaragoza de las 15.00 horas, "la cosa es todavía peor ya que la jornada de muchos funcionarios y de los trabajadores sanitarios concluye a las tres de la tarde y, por lo tanto, no tienen tiempo material de llegar a la estación para coger el tren".
Por todo ello, desde el Partido Popular de Calatayud han calificado de "desastrosa" la política de horarios programada por Renfe, ya que a su juicio, "demuestra una gran falta de visión comercial".
Además, "debe haber trenes en tramos horarios similares tanto para llegar a Calatayud como para ir a Zaragoza, porque si no el servicio no tiene sentido", dice Aranda, quien critica el papel del alcalde de Calatayud, el socialista Víctor Ruiz, dado que "él se ha encargado de negociar con Renfe y ahora vemos el resultado de su negociación, un nuevo desastre para los intereses de nuestra ciudad", concluye.