Riegos del Alto Aragón espera la declaración de Biscarrués para el 20 de junio

Ambiente de la manifestación por el pantano de Biscarrués
EUROPA PRESS
Europa Press Aragón
Actualizado: martes, 7 junio 2011 19:00

HUESCA 7 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Comunidad General de Riegos del Alto Aragón espera conocer entre el 18 y el 20 de junio la declaración de impacto ambiental del proyecto de construcción del pantano de Biscarrués (Huesca).

Así lo ha indicado el presidente de Riegos, César Trillo, quien ha expresado su deseo de que dicha resolución sea favorable para iniciar la construcción del pantano. "De momento vamos a esperar y veremos si la declaración es o no favorable y en caso de que no se dicte la resolución o de que sea negativa, posteriormente lo valoraremos y actuaremos", ha apuntado Trillo.

La construcción del embalse de Biscarrués es una demanda histórica para los regantes de esta comunidad, que ha manifestado reiteradamente su descontento con los retrasos que su tramitación está sufriendo.

Esta situación llevó a la Comunidad General de Riegos del Alto Aragón a celebrar una manifestación el 9 de abril en Zaragoza solicitando la construcción del pantano y a anunciar otra movilización en torno a las elecciones del 22 de mayo.

Sin emabrago, la asamblea de Riegos celebrada el 29 de abril decidió posponer esta segunda manifestación hasta después de las elecciones y dio un plazo al Ministerio de Medio Ambiente para que dictase la declaración de impacto ambiental del embalse.

Trillo ha manifestado que "el día 6 de junio se cumplió el plazo de presentación de escritos y por ley hay un plazo de tiempo para redactar la resolución, de entre diez a doce días, por lo que esperamos conocer dicha declaración entre el 18 y 20 de junio".

El proyecto original del embalse de Biscarrués, fechado en 1992, establecía una capacidad de 192 hectómetros cúbicos, pero la Comisión del Agua lo redujo a 35 hectómetros cúbicos, ya que el primer proyecto conllevaba la inundación del núcleo habitado de Erés.

El pantano defendido por unos ha encontrado siempre la oposición de la Coordinadora Biscarrués-Mallos de Riglos, que considera que su construcción acabará con la actividad turística y económica de esta parte de la provincia de Huesca, que se basa en gran parte en actividades acuáticas relacionadas con el río.

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