El servicio de intervención familiar del Gobierno de Aragón atiende a más de 50 familias por el impacto de la COVID. - GOBIERNO DE ARAGÓN
ZARAGOZA, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
El servicio de intervención familiar del Gobierno de Aragón para paliar el impacto de la COVID-19 en las familias aragonesas ha atendido a 52 familias a lo largo de 2021, superando las previsiones iniciales. Este es uno de los datos incluidos en el balance anual que ha hecho de este servicio de la Dirección General de Igualdad y Familias, según ha indicado el Ejecutivo autonómico en una nota de prensa.
La directora general de Igualdad y Familia del Gobierno aragonés, Teresa Sevillano, ha explicado que este servicio se creó con tres objetivos fundamentales: asesorar a las familias en la gestión adecuada de las relaciones intrafamiliares generadoras de conflicto --dificultades de convivencia y/o violencia en el ámbito familiar--, atender situaciones de duelo por pérdidas significativas y ayudar a las familias a resolver las dificultades encontradas para incorporarse a la nueva normalidad.
La encargada del servicio, tras la correspondiente contratación pública, ha sido la Asociación Aragonesa de Terapia Familiar, con tres terapeutas especializados en familias y otros tres profesionales titulados con el Máster en Intervención familiar y sistémica de la Universidad de Zaragoza. Estos últimos lo han hecho de forma voluntaria apoyando a los terapeutas en las necesidades planteadas por la gestión del servicio.
En total, se han llevado a cabo 416 sesiones con las 52 familias, siendo el 74,5 por ciento de estas biparentales y el 19,6 por ciento monoparentales encabezadas por una mujer.
Según el balance de este servicio, las edades de las personas adultas se han concentrado entre los 40 y los 54 años y la de los hijos entre los 12 y los 14 años --adolescentes--. Además, el 80 por ciento de las familias han llegado derivadas de otros servicios como el educativo --25 por ciento--, el sanitario --23 por ciento-- y los servicios sociales --20 por ciento--. El resto de las personas que ha acudido a la asesoría conoció el servicio a través de su entorno o de entidades sociales.
RELACIONES DE CONFLICTO
La mayoría de las familias han pedido ayuda para gestionar de forma adecuada las relaciones intrafamiliares generadoras de conflicto. En segundo lugar, se sitúan las familias afectadas por una difícil adaptación a la nueva normalidad y, en unos pocos casos, se han atendido situaciones de duelo, trastornos de la conducta alimentaria, violencia filio-parental y problemas de pareja.
Teresa Sevillano ha detallado que el 82,6 por ciento de las familias que han sido atendidas considera que el servicio le ha ayudado a mejorar el problema consultado.
NUEVA NORMALIDAD
En las conclusiones del informe anual de este servicio se apunta que la COVID ha visibilizado problemas que ya tenían las familias y que han emergido con la pandemia de forma más disfuncional.
Asimismo, la "nueva normalidad" ha generado cambios en las familias, observándose un mayor ascenso de la denominada "jerarquía invertida": los hijos son los que tienen el poder en las familias y los progenitores no siempre disponen de herramientas suficientes para establecer límites claros. También se constata que la etapa de la adolescencia se evidencia como la que genera mayor conflicto en las familias.
El confinamiento, además, se cuenta en el informe, ha hecho que las personas contengan más sus emociones y que se produzcan bloqueos emocionales en los miembros de la familia.
Asimismo, ha quedado patente que la coordinación intersectorial entre los servicios sanitarios, educativos y de servicios sociales ha resultado, una vez más, la vía más adecuada para la atención integral a las necesidades de las familias.