ZARAGOZA, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
El incendio forestal de Valderrobres (Teruel) ya está controlado y los efectivos de emergencia están ahora concentrados en el incendio que se ha registrado este jueves en la localidad zaragozana de Nonaspe con el objetivo de controlarlo lo antes posible. Las llamas han calcinado, por el momento, una superficie de unas 500 hectáreas.
El consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Joaquín Olona, ha apuntado en rueda de prensa que hay acumulación de medios en la zona para controlarlo lo antes posible, ya que "en una zona como Nonaspe de muy baja altitud y con estas temperaturas no se nos puede ir de las manos".
Asimismo, la situación ha obligado a elevar el incendio de Nonaspe a situación operativa nivel 1 ante la posibilidad de que el fuego pueda afectar gravemente a bienes de naturaleza forestal o, levemente, a la población y bienes de naturaleza no forestal
En la zona se encuentran cuatro helicópteros, un hidroavión, dos cuadrillas helitransportadas y otras dos terrestres, dos autobombas, el puesto de mando avanzado, una cuadrilla de Brigada de Refuerzo en Incendios Forestales (BRIF) de Prado de los Esquiladores (Cuenca) y el director de incendios ayudado por el GADEX --Grupo de Apoyo al director de extinción--.
Además, en el límite entre Aragón y Navarra, en la Sierra de Leyre, los operativos aragoneses han estado prestando apoyo a los navarros, ha expresado la consejera de Presidencia, Mayte Pérez agregando que esta situación de altas temperaturas obligó ayer a activar en la Comunidad el Plan Territorial de Protección Civil de Aragón (PLATEAR).
En este sentido, la consejera de Presidencia ha instado a los aragoneses a extremar las precauciones frente a esta ola de calor, especialmente, los sectores más vulnerables de la población. Ha recordado algunas medidas como la importancia de la hidratación, de evitar las exposiciones al sol durante las horas centrales del día o evitar salir con altas temperaturas.
CULTURA DE PREVENCIÓN
Respecto a las zonas de montaña, Mayte Pérez ha señalado que lo más prudente durante este fin de semana es que la gente se mantenga en sus casas y que sigan las recomendaciones recientemente emitidas por el Club de Montaña.
Todos los medios y todos los dispositivos se encuentran preparados para actuar con celeridad en caso de que sea necesario, ha enfatizado Mayte Pérez quien ha agradecido "el compromiso" de todas aquellas personas que trabajan en las emergencias.
Con las previsiones actuales, los próximos días, y especialmente el sábado, la alerta por incendios forestales situará en el máximo nivel, color rojo, con condiciones especialmente propicias para que puedan producirse Grandes Incendios Forestales (GIF).
Mayte Pérez ha señalado la importancia de generar "un cultura de prevención" y ha subrayado que activar un helicóptero cuesta en torno a 2.500 euros la hora.
Por su parte, el consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Joaquín Olona, ha pedido "máxima prudencia" y que se suspendan las actividades tanto productivas como lúdico-deportivas que pongan en riesgo la salud de las personas a causa de estas elevadas temperaturas.
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"Cualquier actividad agrícola en estos momentos es muy peligrosa", ha dicho Olona agregando que la comunidad autónoma se encuentra atravesando una situación de "riesgo extremo" de la que "no tenemos conocimiento de una situación tan peligrosa".
En esta línea, ha dicho que si no hay mas remedio que continuar con la actividad ha sugerido poner en práctica todas las recomendaciones que se difunden desde hace años acerca de las olas de calor y que se pueden consultar en la página web del Gobierno de Aragón 'www.aragon.es'.
"Si no queda más remedio que hacer cualquier actividad al aire libre vayan provistos de un extintor", ha manifestado.
La Comunidad Autónoma de Aragón se encuentra en estado de "máxima activación" desde este jueves y cuenta con "medios eficaces y preparados pero limitados" para atender los focos de incendio, motivos por el que el consejero ha lanzado el mensaje a la ciudadanía de ser responsable y contribuir, dentro de sus posibilidades, a evitar la generación de focos de incendio.