Zaragoza.- La Fundación Papa Luna trabajará para divulgar el nombre de Benedicto XIII y desmitificar su figura

Actualizado: domingo, 13 mayo 2007 15:11

ILLUECA (ZARAGOZA), 13 May. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Papa Luna, recientemente constituida, trabajará para divulgar el nombre del illuecano Pedro Martínez de Luna, el Papa Benedicto XIII, y "desmitificar su figura porque se dice de él que era el antipapa y esto no es así", señaló el presidente de la Fundación, Isabelo A. Forcén, en declaraciones a Europa Press. "Para mí, el Papa Luna es uno de los hombres universales que ha tenido Aragón, y yo lo comparo con Fernando El Católico", apostilló.

Para la Iglesia Católica Romana, los antipapas son aquellos que han exigido un título de Papa de forma no canónica, generalmente en oposición a un papa específico o durante algún periodo en el cual la sede estaba vacante, pero no significa que el 'antipapa' siga una doctrina contraria a la fe enseñada por la iglesia.

Por ello, la Fundación va a tratar de restablecer el buen nombre de Benedicto XIII, mediante la investigación, estudio restauración, divulgación y puesta en valor de todo el patrimonio artístico y cultural referido al Papa Luna.

La Fundación surge como iniciativa del illuecano Isabelo Forcén. "Contacté con el Ayuntamiento y la Comarca porque la idea era crear un mueso y recuperar todo lo que se pueda de la biblioteca del Papa Luna, en la que pueden encontrarse más de 1.200 volúmenes, adquiriendo algunos de ellos y fotocopiando, y con ediciones facsímiles, otros" para completar la biblioteca.

De esta manera, la Fundación se ha ubicado en el Castillo del Papa Luna en Illueca, donde también se ubicará en un futuro el museo dedicado a la figura del Sumo Pontífice, así como la biblioteca con sus obras. Allí también "haremos cursos y talleres, e incluso estamos pensando en hacer un Congreso, esta idea surgió del Arzobispado, que reúna a las localidades con las que el Papa Luna tuvo relación", apuntó.

De momento, y "aunque soy optimista" el Patronato de la Fundación está esperando encontrar a un gerente para que organice todas las actividades programadas; "buscamos una persona joven que tenga inquietudes en esta materia", apuntó Forcén.

El Patronato está compuesto por el presidente de la Fundación, Isabelo Forcén; el alcalde de Illueca y presidente de la Comarca del Aranda, José Javier Vicente Inés, que actúa como vicepresidente del Patronato; y como vocales participan el arzobispo de Zaragoza, Manuel Ureña, el obispo de Tarazona, Demetrio Fernández, el presidente de Cajalón, Bruno Catalán, y el subdirector de CAI, Juan Antonio García.

Entre todos ellos, "excepto la Iglesia que no ha puesto fondos porque no se lo hemos pedido", se han reunido 30.000 euros con los que la Fundación ha comenzado a funcionar. "Otras instituciones no han podido participar en el Patronato porque se lo impedían sus estatutos, pero nos han dado su apoyo y nos han ofrecido su colaboración para actividades puntuales", aclaró el presidente de la Fundación.

"Ahora hay que empezar a generar actividad y espero que de aquí al verano tengamos un gerente que comience a moverse", añadió. Además, esta iniciativa se enriquece con el anuncio del Gobierno de Aragón, realizado esta misma semana, recordó Forcén, de declarar Bien de Interés Cultural el cráneo parcialmente momificado de Benedicto XIII, que se encontró dentro de un estuche de madera cerrado que, a su vez, se hallaba en una hornacina también cerrada de la capilla del Palacio de los Condes de Arguillo, en Saviñán (Zaragoza). "Esta medida evitará que se dañe, se pierda o se pueda comercializar la única parte que nos queda del Papa Luna", señaló Forcén.

PAPA LUNA

Pedro Martínez de Luna, (Illueca (Zaragoza), 1328-Peñíscola (Castellón), 1424), fue el Papa Benedicto XIII, más conocido con el apelativo del 'Papa Luna', papa en la obediencia de Aviñón, cardenal desde diciembre de 1375.

Nacido en Illueca --Reino de Aragón--, era miembro de la familia Luna, una de las ocho principales familias aragonesas, emparentada con arzobispos y reyes. Se dedicó a la iglesia, siguiendo la tradición familiar, y estudió leyes en la Universidad de Montpellier, en la que más tarde fue profesor de derecho canónico.

Fue nombrado cardenal por el papa Gregorio XI, y elegido pontífice a la muerte de Clemente VII (en 1394), por 20 votos de los 21 y adoptó el nombre de Benedicto XIII. Francia se opuso a su nombramiento porque era súbdito de la Corona de Aragón.

Por ello, se le presionó para que renunciara, a lo que se negó alegando un daño irreparable a la iglesia. Aunque en un momento dado hubo tres papas simultáneamente (Juan XXIII, Gregorio XII y él), Benedicto siempre adujo que su papado era el válido dado que él era el único papa que había sido elegido cardenal antes de que se produjese el Cisma, y por tanto el único realmente legítimo. Pero finalmente, fue depuesto en el concilio de Constanza --convocado el 30 de octubre de 1413 por Juan XXIII,--, junto con a los papas de Aviñón y Roma, dejando a Martín V como pontífice único en Roma.

Martín V envió a España a un legado con la misión de envenenar a don Pedro Luna, pero no tuvo éxito. Don Pedro Martínez de Luna murió en 1423, a los 96 años en Peñíscola, donde había situado la sede papal, en el antiguo castillo de la Orden del Temple.