ZARAGOZA, 30 Jul. (EUROPA PRESS) -
La residente de la Casa de Amparo Julia Gracia Ribaut cumplió hoy cien años de vida en compañía de la concejal delegada de Acción Social y del Mayor del Ayuntamiento de Zaragoza, Isabel López, la directora de esta residencia pública municipal, Pilar Pastor, y la superiora de la Comunidad Religiosa de las Hijas de la Caridad en la Casa de Amparo, sor Cirila. Además, estuvo acompañada de los 180 ancianos que residen en estas instalaciones municipales.
"Ni yo me creo que tenga cien años", afirmó entusiasta Julia Gracia a los medios de comunicación antes del homenaje, que se celebró en el teatro de la Casa de Amparo."No esperaba tanto pero se han volcado conmigo y voy a recibir muchos regalos".
En esta celebración participó la Rondalla de Santa Isabel, que interpretó varias jotas, y también contó con la presencia de tres concejales del Partido Popular en el consistorio zaragozano, Cristina Melendo, Carmen Galindo y Dolores Serrat. Entre los regalos se encontraba un ramo de cien rosas blancas de sus sobrinos y una placa conmemorativa de los trabajadores y los residentes de la Casa de Amparo.
La anciana aseguró que "mi vida ha ido bien, y he estado soltera, casada y sin hijos; y ahora viuda". Natural de Cariñena, Julia Gracia aseguró que "es un pueblo muy majo, está muy bien para mí" y aseguró que, a pesar de que "el vino de Cariñena quita las penas, a mí no me las quita ni me las pone, porque no lo tomo".
Julia Gracia señaló que el secreto de su longevidad es que "he sido muy tranquila toda la vida, no me he alterado", y añadió que "he hecho mucho repujado en metales y he trabajado mucho y he hecho muchas miniaturas, como un violín completo y, en una caja de cerillas hice una casa con cuatro habitaciones completas".
Si bien indicó que "no me acuerdo de nada de estos cien años", sí que resaltó que "sí de la Guerra, que me cogió en Bilbao, donde hice el Servicio Social". Asimismo, declaró que "Zaragoza está muy cambiada y está prosperando mucho", y añadió que "estaré encantada de la vida" de visitar la Expo al año que viene "si estoy; a lo mejor me llevan".
La concejal delegada de Acción Social y del Mayor del Ayuntamiento de Zaragoza, Isabel López, asistió al homenaje y señaló que "es un gran placer para mí estar hoy aquí y poder celebrarlo con ella y con los residentes de la Casa de Amparo".
"Hoy estamos en un día importante, sobre todo para Julia y para las personas que residen aquí y para sus familiares", porque "llegar a cien años es muy difícil y ella está muy viva, es muy pizpireta, y está todos los días cantando, muy contenta".
Asimismo, la edil recordó que "desde el Ayuntamiento de Zaragoza, aparte de poder celebrar los cien años con cada persona, también se celebran las bodas de oro, que se lleva haciendo durante tres años", que son actos que "a ellos les gusta mucho y se sienten muy bien, ya que pocas veces se les reconoce el trabajo que han hecho".
FUTURA AMPLIACIÓN
Respecto a la Casa de Amparo, "está prevista una ampliación, que irá realizándose poco a poco, pero más adelante", manifestó López, al tiempo que añadió que "los presupuestos en Acción Social fueron un compromiso del Ayuntamiento de Zaragoza, de aumentar el presupuesto en un 25 por ciento y yo espero que eso se cumpla".
La Casa de Amparo es una residencia pública municipal que sirve de vivienda permanente para personas mayores y que perta una asistencia íntegra y continuada a quienes no pueden satisfacer las necesidades por otros medios.
Se trata de una residencia para mayores dirigida a la atención social de personas en situación de dependencia. Estas instalaciones dispensan atención sanitaria y social, con funciones de promoción de la salud, prevención de la enfermedad, control y vigilancia de patologías.
