Cascos considera que el paso "lógico y coherente" es transformar Cajastur en una fundación

Francisco Álvarez-Cascos
EUROPA PRESS/FORO ASTURIAS
Actualizado: sábado, 18 junio 2011 22:02

OVIEDO, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Foro Asturias y candidato a la Presidencia del Principado, Francisco Álvarez-Cascos, ha señalado este sábado a través de una carta a los consejeros generales de Cajastur, que el paso "lógico y coherente" es transformar a la entidad bancaria asturiana en una fundación.

A través del escrito, recogido por Europa Press, Cascos señala que "las cajas de ahorros que se integran en un SIP con un nuevo banco deben transformarse en fundaciones".

Desde Foro Asturias, entienden que la transformación en fundación es "la opción más transparente" para garantizar que la propiedad de los títulos permanezcan en manos públicas; que en el caso de venta de títulos, los frutos de la venta vayan hacia todos los asturianos; que se garantice el control efectivo de la gestión efectuada por los directivos a través del patronato de la fundación; y que se aleja el "riesgo cierto" de operación especulativas de quienes "puedan tener la tentación personal de malvender acciones de Effibank, a un tercero, a cambio de beneficios particulares".

"Se trata de fundaciones normales y corrientes. La nueva Ley de cajas las denomina 'especiales' porque proceden de una caja de ahorros, pero no tienen ninguna particularidad jurídica que las diferencie de cualquier otra fundación. A partir de ahora son, simplemente, entidades tenedoras de las acciones del nuevo banco. Con los dividendos ejercerán la obra social o lo que dicten los órganos de la nueva fundación", ha señalado Cascos.

Además, indica que manda esta carta ante el hecho de que Cajastur quiere "segregar todo el negocio financiero para integrarlo en Effibank", la nueva entidad que surge de la integración con Caja Cantabria y Caja Extremadura, una decisión que se debatirá en Asamblea General prevista para el 29 de junio.

Así, pide que se aplace la decisión. "Ruego encarecidamente", dice a los consejeros generales, que consideren la propuesta de "dejar sobre la mesa" dicho asunto. Cascos hace también referencia a la "elección cuidadosa" de las fechas de las reuniones del Consejo de Administración de Cajastur el pasado 24 de mayo y de la Asamblea General el 29 de junio, que considera "una grave desconsideración hacia todos los asturianos" y expresa su "alarma" sobre que se tomen estas decisiones "en periodo de interinidad política en las instituciones asturianas".

Francisco Álvarez-Cascos argumenta que "los actuales directivos se resisten a esta transformación de las cajas en fundaciones por la sencilla razón de que dejan de controlar efectivamente las entidades". "En nuestro caso, prefieren mantener la ficción de que Cajastur sigue siendo una entidad de crédito de actividad indirecta, con el único objetivo de mantener el estatuto jurídico de caja de ahorros, que se traduce en una dilución real del control de Cajastur", sostiene.

Según Cascos, si Cajastur se transforma en fundación, "los legítimos propietarios de los títulos de Effibank, S.A., al que Cajastur traspasa su actividad, deben ser las entidades fundadoras de nuestra caja de ahorros".

De este modo, incide en que "al constituirse Cajastur en fundación, quedaría sometida al control del protectorado de fundaciones del Principado de Asturias". "La transformación en fundación, con cesión del negocio bancario a Effibank S.A.", dice Cascos, "puede y debe establecerse mediante una ley autonómica de Caja de Ahorros, lo que garantiza y obliga a todos a un gran acuerdo en la Junta General del Principado, hoy sin mayorías que pongan en riesgo el consenso, si esa es la voluntad política de todos".

Al respecto, indica que se debería determinar "su naturaleza pública; estar sometida al protectorado del Principado; el plazo en el que obligatoriamente se transformaría la caja de ahorros en fundación; elaborar los estatutos de la nueva fundación; las funciones de seguimiento y control de la actividad de Effibank, por la titularidad de sus acciones, lo que implicaría incompatibilidad entre detentar responsabilidades ejecutivas en el banco y pertenecer al patronato; decidir el número de patronos, quien los designa y su perfil; decidir si los patronos deben o no ser retribuidos; decidir acerca de la capacidad de administración del patrimonio de la fundación; y decidir acerca del destino de los recursos que ingrese la fundación, procedentes de Effibank".

En esta línea, propone como opciones sobre el nombramiento de los patronos que su número y representación recaigan en la Junta General del Principado "y que todos los estamentos actualmente representados en la actual Asamblea General sigan representados en el patronato de la fundación". "Un patronato que debería estar formado por personalidades de prestigio que garanticen una gestión rigurosa y eficiente, al servicio de los intereses generales de los asturianos", explica añadiendo que "por supuesto, con los recursos obtenidos anualmente por los dividendos, la fundación podría continuar y complementar la actividad cultural y social, al servicio de los ayuntamientos asturianos y del Principado".

Cascos señala, igualmente, que la transformación en fundación garantizaría "la transparencia de cualquier decisión estratégica que tenga que ver con Effibank, al quedar sometida a escrutinio público mediante una entidad pública, la fundación, que tiene la propiedad de los títulos del banco".