Los empleados de La Vega dan por "perdida la batalla" y creen que los políticos o les "engañaron" o son unos "inútiles"

Por la izquierda, López y Fernández, en la rueda de prensa.
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 31 julio 2012 14:56

OVIEDO, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Comité de Empresa de la Fábrica de Armás de La Vega, en Oviedo, Mariano Fernández, ha dado por perdida la "batalla", en el conflicto originado tras el anuncio de traslado de las instalaciones a la factoría de Trubia, por parte de la empresa General Dynamics. Además, culpa a los representantes políticos, desde el alcalde de Oviedo, Agustín Iglesias Caunedo, hasta el presidente del Gobierno asturiano, Javier Fernández, pasando por el delegado de Gobierno, Gabino de Lorenzo, por no haber impedido esta decisión. "O nos engañaron o son unos inútiles", señala.

En una rueda de prensa, acompañado por el secretario de Organización de MCA-UGT en la fábrica, Jesús María López, Fernández ha ofrecido una rueda de prensa en la que se ha mostrado especialmente crítico con los representantes políticos.

El representante sindical ha considerado ya el traslado "un hecho", porque "a la vuelta de las vacaciones, en septiembre, el 80% de la plantilla estará trabajando en Trubia", y el 1 de noviembre "no quedará ni un solo trabajador en La Vega".

No obstante, afirma que el "supuesto" traslado "será de personal, pero no de maquinaria", pues "al ritmo que se está llevando es imposible que se cumplan plazos". Recuerda además que hay máquinas de precisión "que no se están trasladando de manera correcta, si se pretende que estén operativas en Trubia".

"DEFRAUDADOS" CON LOS POLÍTICOS

Afirma que los trabajadores se sienten "defraudados". "No entendemos, si de verdad había un consenso de todas las fuerzas políticas, que una empresa con tanto calado político como General Dynamics tome esta decisión", señala, para recordar a continuación que los contratos necesitan autorización del Gobierno.

Recuerda además que en el anterior intento de traslado, hace tres años, fue interrumpido precisamente por la oposición de los grupos políticos. "O nos engañaron o son unos inútiles", señala el presidente del Comité.

Afirma que les apoyaron "solo de boca", y repasa algunos de los nombres a los que dirige su crítica: el alcalde de Oviedo, Agustín Iglesias Caunedo, a quien recuerda que tanto el Ministerio de Defensa como la empresa se pondrán en contacto con él próximamente; a los diputados de la Junta General, pues "habiéndoles advertido de la premura en el tiempo de un posicionamiento político claro en defensa del patrimonio industrial, se enfrascaron en un debate parlamentario sobre La Vega cuando la empresa ya estaba ejecutando el desmantelamiento de la Fábrica"; el consejero de Industria y Empleo, Graciano Torre, "que tendrá el dudoso honor de ver reflejado en su currículum político la desaparición del sector aeronáutico y la del sector armamentístico"; al delegado de Gobierno, Gabino de Lorenzo, a quien reprocha que en su día se posicionara "firmemente" sobre La Vega, y ahora "firmará" el visto bueno definitivo al traslado; y al ministro de Industria, pues "en un periodo no muy largo podremos ser testigos del incremento de los presupuestos de Defensa y solo nos quedará lamentarnos de otra oportunidad perdida".