Rechaza "radicalizar el discurso anticapitalisa" porque estar en la oposición "ya estrecha el margen con los antisistema"
OVIEDO, 3 Dic. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la Federación Socialista Asturiana, Javier Fernández, ha pedido este sábado al presidente asturiano, Francisco Álvarez Cascos, que "pacte o gobierne" o que "disuelva y convoque", en referencia a unas hipotéticas elecciones autonómicas anticipadas. Así, advierte al Ejecutivo de que ya no ha conseguido "niguna influencia" en Madrid en las elecciones generales, y por tanto sólo lo van a juzgar por "su gestión, y no por su victimismo".
En un discurso en el Comité Autonómico de la FSA en Mieres, Fernández, señala que "nunca en tan poco tiempo, tan pocos destruyeron tanto en Asturias", en referencia a la gestión del Gobierno. "Ante una situación así, en la que hay que gestionar, con un presidente que piensa más con las tripas que con la cabeza, hay que decir: 'oiga gobierne usted, como está en minoría pacte y gobierne, o disuelva y convoque".
Ha acusado al jefe del Ejecutivo autonómico de presentarse como "un adversario del gobierno de España y los cómplices que tiene aquí", haciendo un "discurso anticentralista contra los que son Madrid". "Necesitaba una palanca en Madrid, un grupo de parlamentario, pero ahora no tiene absolutamente ninguna influencia allí, y ahora no lo van a juzgar por su asturianía, sino por su gestión", entiende el representante socialista. Desde su punto de vista, "No hay gestión, ese partido (Foro) y ese presidente no saben gestionar, saben empujar en la dirección equivocada para romper; no respetan nada", critica.
Así, ha recalcado su invitación a pactar y negociar, y recordó a Cascos que "era secretario general de un partido y vicepresidente de aquel Gobierno, cuando decían aquello de 'Pujol enano habla castellano', y al día siguiente se pusieron a hablar catalán en la intimidad".
"NO RADICALIZAR EL DISCURSO"
En referencia a la nueva situación de oposición de su partido a nivel estatal, Fernández opina: "podemos radicalizar el discurso anticapitalista, allá nosotros, pero tener por seguro que el PSOE en la oposición ya significa que se estrecha el margen entre nosotros y los antisistema".
Por eso, desde su punto de vista, el partido debe ubicarse "entre los que dan esperanzas sin realidad, nuestra izquierda", y no en "los que sólo dan realidad sin esperanzas". A su juicio, "el mercado es un instrumento que hay que regular para que no enseñe su lado oscuro, y no una realidad antisocial", por lo que "no vamos a competir en un contexto de crisis con grandes utopías, con grandes imaginarios, serán utopías modestas y una idea mejor de la realidad que la de nuestros oponentes".
Tras asumir la "derrota sin paliativos" que "el pasado 20 de noviembre" sufrió el PSOE, "la más dolorosa que hemos tenido de todas nuestras contiendas electorales en democracia", ha apostado por hacer una "oposición dura y sensata". Así, advierte de que el PP "nos quiere llevar ahora a una oposición de consenso, acuerdo y pacto", pero ha mostrado su oposición, porque "nos llevarán a un consenso en el que seremos indistinguibles y representaremos el mismo vacío".
Además, ha criticado el "populismo" del discurso de la derecha, y destacado el carácter democrático y abierto de su partido, donde cualquier militante con 20 avales puede postularse.
