El Principado concluye este sábado la elaboración del censo anual de aves acuáticas invernantes

Actualizado: viernes, 15 enero 2016 19:05

OVIEDO, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales concluye este sábado la elaboración del Censo Anual de 2016 de Aves Acuáticas Invernantes en Asturias, para lo que ha establecido un dispositivo similar al de años anteriores, que divide la región en 28 sectores.

Para confeccionar la estadística, cuya elaboración ha comenzado este viernes con el recuento de ejemplares en las zonas fluviales, se ha movilizado un contingente de 136 personas formado por técnicos de la Dirección General de Recursos Naturales, guardas del Medio Natural y voluntarios de los grupos local de Asturias de la Sociedad Española de Ornitología (SEO/Birdlife), ornitológico Mavea e Ibérico de Anillamiento.

La consejera de Desarrollo Rural, María Jesús Álvarez, seguirá la realización del censo desde el sector habilitado en San Juan de la Arena (Soto del Barco), en el estuario de la ría del Nalón, a partir de las 11.30 horas, indican desde el Gobierno asturiano en nota de prensa.

El censo de aves acuáticas invernantes del año 2015 incluyó un total de 24.130 ejemplares pertenecientes a 69 especies. Las más abundantes fueron el azulón (4.925), la gaviota patiamarilla (4.301), la gaviota reidora (2712), el comorán grande (1.293) y la cerceta común (903).

Debido a circunstancias meteorológicas excepcionales, como una ola de frío polar, se originan desplazamientos masivos de aves que viajan a lugares en los que se pueden refugiar durante unos días para luego retornar a sus destinos habituales de invernada. Por este motivo, los datos locales no son significativos frente a los datos globales de cada una de las especies.

En el caso de Asturias, cuando los censos coinciden con la llegada de fríos polares, se produce una auténtica invasión de avefría europea y chorlito dorado, aunque esto no signifique nada positivo para el conjunto de la especie, dado que simplemente las aves se contabilizan aquí en lugar de en sus zonas habituales de invernada. Estas situaciones se conocen técnicamente como fugas de tempero.

En 1967, la organización Wetlands Internacional comenzó la realización de Censos de Aves Acuáticas Invernantes, [International Waterbird Census (IWC)], en el Paleártico Occidental. Estas estadísticas, que actualmente se efectúan a escala global, comenzaron a llevarse a cabo en España en la década de los 70. Inicialmente, fueron ejecutadas y coordinadas por la Sociedad Española de Ornitología (SEO) a través de su red de colaboradores. Desde 1990, el Comité Español del Convenio Ramsar y el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente coordinan los censos, que son ejecutados por las comunidades autónomas.

En algunas zonas de Asturias, la primera prospección de aves acuáticas invernantes se realizó en 1975, pero fue en 1978 cuando un grupo de voluntarios de la Universidad de Oviedo completó el primer censo. Desde entonces, el Grupo Ornitológico Aythya, y más tarde la Coordinadora Ornitolóxica d'Asturies, se encargaron de llevarlos a cabo. A partir de 1995, la participación de la Administración autonómica se materializó en las rías del Eo y de Villaviciosa.

En 2002 se estableció un convenio de colaboración entre la Consejería de Medio Ambiente y la Sociedad Española de Ornitología (SEO/Birdlife) para que personal de la Administración y de la propia ONG se encargaran del censo. Además, el área de prospección se amplió a los principales ríos asturianos y a lagos y embalses de zonas de montaña y del occidente.

De 2005 a 2009, los censos se ejecutaron siguiendo los criterios marcados en 2002 y con la colaboración de la Coordinadora Ornitolóxica d'Asturies en las rías del Eo y Villaviciosa. Desde 2010 los realiza la Administración asturiana con la colaboración de los grupos local de Asturias de la Sociedad Española de Ornitología (SEO/Birdlife), Ornitológico Mavea e Ibérico de Anillamiento (GIA).