El Principado sufrió la quema del 15 por ciento de su superficie en los últimos 30 años, según un estudio

Actualizado: viernes, 15 junio 2007 13:52

Valledor destaca la labor de las Brigadas de Incendios ante el porcentaje de causas desconocidas más alto de España, del 60%

La zona del suroccidente es la más afectada de Asturias con una degradación del suelo generalizada sin posibilidad de reforestación

OVIEDO, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Principado de Asturias sufrió la quema del 15 por ciento de su superficie en el período 1984-2003, según el estudio 'Impacto de los incendios forestales en Asturias. Análisis de los últimos 30 años', realizado por el Instituto de Recursos Naturales y ordenación del Territorio de la Universidad de Oviedo (Indurot) y el Principado de Asturias. En total, la superficie quemada asciende a 156.256 hectáreas, con especial incidencia en la zona suroccidental de la comunidad.

El consejero de Justicia, Seguridad Pública y Relaciones Exteriores del Principado de Asturias, Francisco Javier García Valledor, presentó hoy el estudio en compañía de dos de sus autores, Miguel Ángel Álvarez García, y Rosana Menéndez Suárez, y uno de los directores de la investigación, Jorge Marquínez García.

Valledor destacó la labor realizada por las Brigadas de Incendios desde su creación en la actual legislatura. El consejero incidió en que "desde la puesta en marcha de este cuerpo se ha aumentado considerablemente el número de causas llevadas a la Fiscalía de Medio Ambiente y aumentaron el número de procesos penales".

Asimismo, Valledor recordó la importancia de las investigaciones para mejorar las bases de datos sobre zonas y causas de los incendios en la comunidad autónoma ya que el 60 por ciento de los incendios de la comunidad tiene causas desconocidas, el porcentaje más alto de España.

Por su parte, los autores indicaron durante su intervención, la dificultad para concretar las causas y los aspectos concretos de cada incendio debido a la deficiencia de las bases de datos. "Actualmente las bases de datos han mejorado considerablemente lo que permite singularizar estudios y actuar de forma más eficiente en su prevención", apuntó Álvarez García.

Desde 1968 el Estado dispone de una base de datos normalizada que recoge el número de incendios detectados, la superficie quemada, o el tipo de cubierta vegetal afectada. Sin embargo, carece de referencia geográfica precisa, limitándose a la mención del municipio y el paraje. Así, para el estudio presentado hoy se utilizó también imágenes de satélite disponibles para analizar el impacto de los incendios en Asturias.

La obra se estructura en cuatro capítulos, el análisis estadístico descriptivo basado en la información de la base de datos de Incendios Forestales suministradas por '112 Asturias'.

La segunda parte trata la teledetección de incendios que permiten construir mapas anuales de los incendios acaecidos en la comunidad entre 1984 y 2003. Además, este método permite detectar áreas que sufrieron incendios de forma reiterada. "Hay zonas que registraron hasta siete incendios en este período, lo que supone una media de un incendio cada tres años", explicó Álvarez García.

El estudio analiza, también, los efectos erosivos de los incendios en un área concreta de la geografía asturiana, la montaña media occidental, elegida por representar suelos frágiles con graves problemas de degradación y quemadas reiteradas a lo largo del tiempo.

Asimismo, se analizaron parcelas de la zona occidental asturiana no sometidos a incendios como Muniellos. Así, la comparación concluye que el suroccidente es la más afectada de Asturias con una degradación del suelo generalizada sin posibilidad de reforestación en la mayoría de los casos, según esplicaron los investigadores.

Por último, la obra estudia los efectos de los incendios sobre la estructura del paisaje, lo que puso de manifiesto la pérdida de calidad del hábitat provocada por la recurrencia de incendios causadas por el hombre, según explicó el coautor del libro Miguel Ángel Álvarez García.

Por otra parte, Álvarez García indicó la participación del Indurot en un nuevo proyecto de investigación en el período 2005-2006, cofinanciado por el Plan de I+D+i del Principado, con la colaboración de la Consejería de Justicia y dirigido por Rosa Menéndez Duarte, titulado 'Procesos de erosión en las vertientes de la Cordillera cantábrica: relación con los incendios forestales'.

El objetivo del estudio fue obtener la cuantificación de la tasa de suelo perdido en laderas quemadas del occidente de Asturias. Además, se analizó la incidencia d de los incendios en la modificación de la cantidad y el tipo de carbono orgánico de los suelos; y se continuó con el ensayo de la aplicación de la telepredicción en el seguimiento de los incendios a escala autonómica.