Revilla dice que el banco es un "buque insignia de una Cantabria infinita" y cuenta con "un gran equipo humano y un gran líder"
SANTANDER, 9 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, brindó hoy la Medalla de Oro de Cantabria concedida a la entidad en su 150 aniversario a todos los que han hecho que el Santander sea hoy un banco "global y líder". A su juicio la distinción es un "reconocimiento" al trabajo desarrollado por un "equipo imbatible" y por sus 130.000 empleados y directivos.
Botín recogió la Medalla de Oro, máxima distinción que otorga el Gobierno de Cantabria, de manos del presidente regional, Miguel Ángel Revilla, en un acto celebrado en el Paraninfo de la Universidad de Cantabria al que asistieron autoridades regionales y locales, representantes de los distintos ámbitos de la sociedad cántabra, numerosos directivos del Santander y el subgobernador del Banco de España, José María Viñals.
Tras recibir la Medalla y el diploma acreditativo, el presidente del Santander mostró su agradecimiento al Gobierno cántabro y subrayó la vinculación de la entidad con la comunidad autónoma. "Por muy grandes y globales que seamos no olvidamos nuestros orígenes", subrayó Botín, quien aseguró que por eso han elegido la capital cántabra para celebrar los actos del aniversario, que reunirán estos días en la ciudad a unos 1.200 directivos del grupo.
En un discurso en el que relató los orígenes, evolución y expansión del banco, desde la primera oficina que abrió en lo que hoy es el Paseo Pereda, pasando por la fusión que dio lugar al BSCH y llegando hasta la compra del Abbey, Emilio Botín destacó que el Santander es un "banco global y líder" gracias, no sólo al trabajo diario, sino también a una serie de "valores muy sólidos" que ha mantenido en todo momento.
Esos valores son "el dinamismo, la flexibilidad, la vocación de liderazgo, la prudencia en los riesgos, la innovación, la agresividad comercial y la ética profesional". Además, el banco tiene un "plan ambicioso de futuro" para llegar a ser "el primer y mejor banco comercial del mundo y líder en rentabilidad" para sus accionistas y, para conseguirlo, cuenta con lo necesario: "un equipo imbatible", señaló el presidente de la entidad.
Respecto a la vinculación del banco con Cantabria, Botín resaltó que el Santander sigue apoyando la economía de la comunidad y "generando riqueza y empleo" en la región. Además, su implicación con la comunidad se plasma también en su apuesta por la educación, sus colaboraciones con la Universidad de Cantabria, el apoyo a iniciativas sociales y culturales y la participación en proyectos singulares.
Entre dichos proyectos singulares citó el Año Lebaniego -que ha contribuido a "reforzar el interés turístico" de Cantabria- y el Campus Comillas, un proyecto que, a su juicio, "potenciará el desarrollo de Comillas y de toda Cantabria" porque constituye "un activo estratégico de valor incalculable" y una "gran iniciativa para convertir Comillas en referente internacional" en la enseñanza del español.
"BUQUE INSIGNIA DE UNA CANTABRIA INFINITA"
También el presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, aludió a esa participación del Santander en proyectos de la región y en especial en el Campus Comillas del que, en sus palabras, Botín es un "defensor a ultranza", lo cual constituye una "garantía absoluta de éxito" para el proyecto. Revilla relató múltiples ejemplos de la "faceta filantrópica" de Emilio Botín, al que se refirió como "un cántabro confeso y profeso, que ejerce de cántabro".
El jefe del Ejecutivo autonómico aseguró que los cántabros se sienten "orgullosos" del Santander y de su presidente, que representan un "buque insignia de una Cantabria infinita" que, al igual que el Banco Santander, "en momentos de convulsión política nacional apuesta por el objetivo de seguir mejorando y creciendo".
Revilla, que deseó "larga vida" a la entidad y a Emilio Botín, se mostró convencido de que "ninguna" de las medallas de oro de Cantabria concedidas en la historia de la comunidad "es tan merecida" como la entregada hoy al Banco Santander, "un gigante con domicilio social en Santander, en la capital de Cantabria", que cuenta "con un gran equipo humano, bajo la dirección de un gran líder" y que ha hecho más que nadie por la "difusión" de la imagen de la ciudad.
UN HOMBRE "IMPRESCINDIBLE"
El presidente regional explicó que la primera intención del Gobierno de Cantabria fue conceder la Medalla de Oro a Emilio Botín, que en su opinión la tiene "sobradamente merecida", pero él se opuso a que fuera una distinción personal y "no hubo manera de convencerle". Según Revilla, Botín le advirtió que sólo aceptaría la medalla si se concedía al banco y así ha sido.
El banquero también pidió a Revilla que en el acto de hoy no hablara de su persona, sino de la entidad financiera, pero esta petición no fue atendida por el presidente cántabro, quien ensalzó la figura del máximo responsable del Santander y, rechazando la máxima de que "nadie es imprescindible", aseguró que "si hay gente imprescindible, Emilio Botín es uno de ellos".
"PROTAGONISTA" DEL CAMBIO ECONÓMICO
Por su parte, el subgobernador del Banco de España repasó la "brillante trayectoria" del Santander, que puso como ejemplo "de lo que mueve e inspira a las gentes" de Cantabria. Subrayó de modo especial la contribución del sistema bancario español al desarrollo de la economía del país y a la transformación de España y recalcó que el Banco Santander "ha sido indiscutiblemente protagonista" de ese proceso.
Viñals destacó que desde la fundación del Santander en 1857 (el 17 de marzo se cumplen los 150 años) ha experimentado un "notable proceso de transformación", al igual que ha sucedido con la economía española.
En los últimos años recordó que España ha pasado de tener una economía "escasamente desarrollada y sumida en una profunda crisis" entre mediados de los 70 y los 80, a contar en la actualidad con una economía con un "elevado grado de desarrollo", un cambio que, desde su punto de vista, habría sido difícil sin la modernización del sistema financiero, que se caracteriza hoy por su "solidez y su eficiencia".
LA SOCIEDAD CÁNTABRA CON EL SANTANDER
En el acto de entrega de la Medalla de Oro de Cantabria al Banco Santander, los numerosos directivos de la entidad asistentes al acto estuvieron acompañados por centenares de representantes de la sociedad cántabra. El Gobierno de Cantabria prácticamente en pleno, entre ellos el presidente y la vicepresidenta, Miguel Ángel Revilla y Lola Gorostiaga, asistió al evento, al igual que el delegado del Gobierno, Agustín Ibáñez, y el presidente del Parlamento cántabro, Miguel Ángel Palacio.
La representación local la encabezó el alcalde de Santander, Gonzalo Piñeiro, y también se sumaron a este reconocimiento del banco diputados nacionales por Cantabria, el presidente del PP cántabro, Ignacio Diego, y el rector de la Universidad de Cantabria, Federico Gutiérrez-Solana, además de representantes del ámbito de la judicatura, la empresa, las fuerzas de seguridad y, en general, de la sociedad civil cántabra.
No faltaron tampoco familiares de Emilio Botín, como su esposa, Paloma O'Shea, y su hija Ana Patricia Botín, consejera del Santander y presidenta de Banesto, banco al que también hizo diversas alusiones Emilio Botín al repasar la historia del Santander.
