Recurrirán una sentencia que absolvía a un hombre por llamar "payaso" a un colegiado y amenazarle SANTANDER, 11 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Colegio de Médicos de Cantabria creará un protocolo de actuación ante las agresiones que puedan recibir sus colegiados, según anunció hoy en rueda de prensa el presidente de esta organización profesional, Pablo Corral.
Corral indicó que dicho protocolo estará ultimado "en próximas semanas" ante el "aumento de agresiones" que recibe este colectivo a nivel estatal, y la "poca respuesta que estamos teniendo de la Administración".
En este sentido, Corral afirmó que el Colegio de Médicos recurrirá la sentencia dictada por el Juzgado de Instrucción número 2 de Santoña, en la que se absolvía a un hombre acusado de una falta de injurias y otra de amenazas contra un profesional de la sanidad pública.
Según recoge la sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press, los hechos ocurrieron en diciembre pasado, cuando un matrimonio acudió a la consulta de un facultativo en el Servicio de Urgencias de Meruelo para que explorase a su hija de tres años, que presentaba dolores de tripa y vómitos. Sin embargo, dado el estado de nerviosismo de la pequeña, fue imposible realizar la exploración.
A consecuencia de esta situación, se produjo un incidente entre el padre de la menor y el médico, que dijo a los padres de la niña que hasta que ésta no se tranquilizara, no sería posible su exploración.
Ante esta actitud, el padre de la paciente contestó al facultativo que era "un payaso y un incompetente" y dijo "tú que te has pensado; tu eres pediatra o qué eres, a mi hija no la vuelves a retirar las piernas de esa forma; te he visto como la has empujado y cuidado no te vaya a encontrar por ahí".
Por estos hechos, el facultativo presentó una denuncia, que dio lugar a un juicio en el que su abogado solicitó la condena del padre de la menor por sendas faltas de injurias y amenazas.
El juez absolvió sin embargo al acusado al considerar que su conducta no es perseguible penalmente, y que aunque "deplorable e inoportuna" fue fruto de las circunstancias, con unos padres que acuden al médico con su hija pequeña que requiere de "un mayor tacto", y "más paciencia", y concluye que la jurisdicción penal está dirigida a castigar "ilícitos penales" y no a "velar por el buen cumplimiento de las normas básicas de educación".
Corral expuso que los médicos, como "funcionarios", deben de tener "todas las defensas y medidas" que garanticen su seguridad, calificando la sentencia de "incomprensible", por lo que el Colegio está "profundamente indignado".
