SANTANDER, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
El número de operaciones de compraventa de viviendas registrado en Cantabria durante el segundo trimestre del año se redujo un 27,09 por ciento con respecto al mismo periodo de 2006, con un millar menos de transacciones, según datos de la Estadística Registral Inmobiliaria del Colegio de Registradores, recogidos por Europa Press.
De acuerdo con esos datos, de abril a junio se vendieron en la región 2.777 viviendas, 1.032 menos que en el mismo periodo del pasado año. La cifra disminuyó también con respecto a los tres primeros meses de 2007, en los que se contabilizaron en la región 3.515 compraventas.
El retroceso en la venta de viviendas se constató tanto en las nuevas como en las usadas, pero fue especialmente acusado en este último grupo. Así, en el segundo trimestre se alcanzaron 1.493 transacciones de vivienda usada en Cantabria, frente a las 2.338 de los mismos meses de 2006, lo que supone una caída del 36,14%.
En el caso de la vivienda nueva, el retroceso fue del 12,71%, al pasar de 1.471 ventas de abril a junio del año 2006 a 1.284 transacciones en idénticos meses del presente ejercicio.
De todas maneras, lo sucedido en Cantabria es reflejo de una tendencia del mercado inmobiliario en todo el país, sólo que más acusado en la región. En toda España se vendieron durante el segundo trimestre unas 206.000 viviendas, con un descenso del 11,55% respecto al mismo periodo del año anterior.
En Cantabria la caída fue más del doble de la nacional (27%), sobre todo por el comportamiento de las ventas de la vivienda usada, ya que el descenso de transacciones en vivienda nueva fue similar en la región (-12,71%) y en el país (-10,23%). En cambio, la caída de las compraventas de vivienda usada en la Comunidad Autónoma (fue del 36,14%) triplicó la media nacional (-12,48%).
A pesar de esos descensos más acusados que en el conjunto nacional, Cantabria sigue superando la media de transacciones inmobiliarias por cada mil habitantes. Así, en el segundo trimestre se vendieron en la región 4,89 viviendas por cada mil habitantes, frente a una media de 4,61 en el resto del país.
