SANTANDER, 23 Dic. (EUROPA PRESS) -
Ecologistas en Acción ha presentado alegaciones al proyecto de campo de golf en la zona de Cueto, una iniciativa que ha entrado en fase de tramitación ambiental y en la que ven una "obra de carácter privada con fines puramente especulativos".
La asociación ecologista criticó este proyecto por su impacto ambiental sobre la vegetación, el terreno y los manantiales, pero también los efectos "sociales" por el cierre para el uso del campo de caminos por la costa.
"Una vez más, el ayuntamiento de Santander, y tras urbanizar prácticamente todo su territorio, se embarca en un proyecto insostenible que beneficiarán sólo a unos pocos y que va a eliminar una de las pocas áreas con ciertos valores naturales que conserva el municipio", asevera la asociación ecologista.
Según sostuvieron, "en una ciudad cada vez más saturada de construcciones y transporte privado no se debería desaprovechar la oportunidad de dar un uso sostenible a una zona a la que todos los ciudadanos de Santander pudieran acudir a disfrutar del casi único espacio natural que aún se conserva", en lugar de hacer "inaccesible" parte de la costa a los vecinos que no jueguen al golf.
IMPACTOS
Según advirtieron, este proyecto supondrá una transformación en el uso y en las propiedades del suelo, ya que, según dijeron, se eliminarán 20 hectáreas de la cubierta vegetal existente.
"Esta cubierta vegetal natural será sustituida por especies alóctonas propias de parques y jardines urbanos, con la consiguiente pérdida de biodiversidad", alertaron.
Además, aseguraron que estos impactos afectarán "directamente" a los manantiales y cursos de agua de la zona, tanto superficiales como subterráneos, debido al "consumo total" del campo de golf para el regadío, "sobre todo en la época estival". "Si se utilizan plaguicidas y herbicidas en el mantenimiento del césped del campo, se contaminarán los acuíferos así como la fauna existente, fundamentalmente anfibios y reptiles", añadieron.
Las obras también pueden producir modificaciones en la topografía del terreno, pudiendo llegar a afectar a la zona de dunas de la playa de El Bocal.
En cuanto al impacto social, señalaron que afectará a los caminos abiertos que tradicionalmente se utilizan para acceder a la costa y que con la posible construcción del campo de golf "dejarían de poder utilizarse".
"El impacto de una obra de carácter privado con fines puramente especulativos hará inaccesible el uso de la misma al total de la población de Santander que no practique el golf en dicha instalación", incidiendo en que sus "únicos futuros clientes serán personas con una capacidad adquisitiva media-alta".