El obispo de Santander impone este miércoles la ceniza a los fieles en la catedral

La Misa se celebrará a las ocho de la tarde y con esta jornada la Iglesia inicia la Cuaresma, en la que se invita a la "conversión"

Europa Press Cantabria
Actualizado: martes, 12 febrero 2013 19:52

SANTANDER, 12 Feb. (EUROPA PRESS) -

El obispo de Santander, Vicente Jiménez Zamora, presidirá este miércoles, a las ocho de la tarde en la catedral de Santander, la tradicional misa del Miércoles de Ceniza, durante la cual se impondrá la ceniza a todos los fieles.

Con esta jornada, la Iglesia inicia el ciclo litúrgico de la Cuaresma, "un tiempo de conversión de los corazones", destaca el Obispado en un comunicado, en el que recuerda que en la Misa, después del Evangelio y de la Homilía, se bendice y se impone la ceniza hecha, según la tradición, de los ramos de olivo y similares y bendecidos en el año precedente.

Añade además que este miércoles es día de ayuno y de abstinencia para los fieles católicos. Asimismo, con motivo del inicio de este tiempo litúrgico, el obispo ha presentado una carta pastoral en la que recuerda que con esta jornada se comienza la Cuaresma, un tiempo de "conversión y de solidaridad", pero también un tiempo de "peregrinación interior" hacia Dios, que es la "fuente" de la "caridad y de amor a los hermanos".

GESTO SOLIDARIO

La Diócesis de Santander emprenderá también este año la campaña, "Ayuna, Comparte y Ora" con el fin de recaudar limosnas en unas huchas de cartón que se distribuyen en las parroquias para ayudar a la realización de tres proyectos avalados por los propios obispos de las zonas pobres a las que se ayuda.

Con esta campaña también se contribuye a mantener la Casa Hogar Belén de enfermos de Sida de Santander que construyó la Diócesis en 2001.

Los proyectos solidarios a los que se apoyará este año con esta campaña que se activa con el inicio de la Cuaresma se encuentran en Uganda, India, Haití-República Dominicana.

El obispo recuerda que las huchas solidarias de Cuaresma son un "gesto" para mantener "viva la unión entre la fe y la caridad", y para promover la "conciencia" de solidaridad y de atención a los pobres y necesitados.

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