SANTANDER 31 May. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Guardia Civil pertenecientes al Seprona tuvieron que rescatar a un conductor que se lanzó por un terraplén tras huir para evitar ser sometido a un control de alcoholemia.
Según la información facilitada hoy por dicho Cuerpo, los hechos ocurrieron en la noche del pasado lunes, 28 de mayo, cuando agentes de la Guardia Civil pertenecientes a la patrulla del Seprona, se encontraban prestando servicio en la localidad de San Roque de Riomiera, y observaron a una persona que circulaba de forma extraña con un vehículo.
Tras darle el alto, y cuando los agentes intentaban identificar al conductor, identificado como B.M.L. éste se dio a la fuga, siendo perseguido por la patrulla que le localizó nuevamente en el barrio de la Concha, en la subida al puerto de Lunada.
Después de ser interceptado, los agentes solicitaron la realización de la prueba de alcoholemia al conductor, quien se negó a su realización y que, en un momento de la intervención, se dio a la fuga por un terraplén que desemboca en el río Miera, quedando en un punto con gran dificultad para subir y muy cerca del río que llevaba gran cantidad de agua.
Ante esta circunstancia, los agentes iniciaron las labores de auxilio del huido, y, con ayuda de una cuerda y una escalera que les facilitaron unos ciudadanos que se encontraban en la zona, consiguieron izarle, pese a su negativa a ascender.
Concluido el servicio, el rescatado amenazó a los guardias civiles, y posteriormente, se le intervino un revolver detonador, por lo que se procedió a su detención a las 0.30 horas. Tras la detención, el arrestado fue trasladado a un centro médico a fin de que fuera tratado de las diferentes contusiones que se produjo al lanzarse por el terraplén.