SANTANDER, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Cantabria, Miguel Angel Revilla, señaló hoy que la opinión del Gobierno sobre la comercialización o no de la anchoa capturada en la campaña experimental "la tendrá el consejero de Ganadería, Agricultura y Pesca" y apoyó la postura de éste de no vender el bocarte que se pesque en dicha campaña.
Revilla respondió así a las preguntas de los periodistas sobre la postura de la vicepresidenta del Ejecutivo, Lola Gorostiaga, quien abogó ayer por comercializar las capturas de los barcos españoles en la campaña experimental de la anchoa.
"La teoría del consejero -de no comercializar lo que se pesque- es la que yo suscribo, porque es el que tiene mayor información del tema", indicó Revilla, quien señaló que incluso "no habría necesidad de pescar, porque se puede detectar incluso sin captura física de la especie si el caladero se está recuperando o no".
El presidente, insistió en que "hay que garantizar el futuro de la especie y no cegarnos a corto plazo, porque a la larga lo importante es que volvamos a tener anchoa del Cantábrico" y que Cantabria vuelva a tener un sector "emblemático como lo ha sido hasta ahora" que "no es solo una economía, es una imagen que tenemos de un recurso único, comparable al aceite de oliva, el jamón de jabugo o el caviar iraní", apuntó.
"Personalmente la opinión que tengo es que hay que intentar salvar el caladero", dijo Revilla, quien destacó que el de la anchoa es "un sector clave para el futuro de Cantabria", y "tenemos que hacer comprender a las autoridades comunitarias que si no hay una garantía de la recuperación de ese mínimo de 28.000 toneladas reproductoras, hay que vedar absolutamente el caladero porque de otra manera estaríamos con pan para hoy y hambre para mañana", afirmó el persidente, que hoy inauguró las instalaciones de la fábrica de hielo de la lonja de Santander.
El presidente regional, quien precisó que su postura no supone una "discrepancia" con la vicepresidenta, se remitió a lo que muestren los primeros estudios y mostró su deseo de que éstos "pudieran dar justificación a una mínima captura; pero lo bueno sería una veda razonable, integral, para que pudiéramos recuperar esa masa biológica de reproducción mínima", afirmó.
"No podemos pensar en el corto plazo, hay que pensar en el futuro", señaló el presidente, quien indicó que "lo que está claro es que ha habido una suprautilización de esos recursos y que hemos puesto en peligro la propia especie, que es vital para el mantenimiento de la industria conservera en Cantabria", subrayó.
Revilla apuntó también que "sería asumible" que se estuviera un par de años, si así lo indican los estudios, sin captura de bocarte, "elaborando otro tipo de anchoa, indicando claramente que ese bocarte no es del Cantábrico, pero vamos a esperar a que terminen los estudios biológicos que se van a hacer la semana que viene", indicó.
El presidente de Cantabria indicó por último que no está de acuerdo en que los franceses pesquen anchoa para venderla y remarcó que el caladero "es de Francia y del Cantábrico" y de lo que se trata es de preservar la especie, "y si hay riesgo de que nos la carguemos hay que hacer una política del tipo que sea", indicó.
