SANTANDER, 22 May. (EUROPA PRESS) -
Todos los alumnos de enseñanzas obligatorias, unos 48.000, desde 1º de Primaria hasta 4º de Secundaria, se beneficiarán el próximo curso del Plan de Gratuidad de Libros y Materiales Curriculares de la Consejería de Educación, que también introduce como novedad el pago a través de un cheque-libro nominativo canjeable por textos y materiales.
De esta medida se podrán beneficiar todos los estudiantes que inicien nuevo curso y los que repitan 6º de Primaria y 4º de Secundaria, los dos únicos cursos en los que el año pasado no incidió el Plan de Gratuidad. También tendrán derecho a la ayuda los estudiantes que repitan curso en colegios o institutos donde cambie más del 50% de los libros de texto.
Ésta es la principal novedad del Plan de Gratuidad de Libros y Materiales Curriculares para el curso 2009-2010, que hoy ha presentado la consejera de Educación, Rosa Eva Díaz Tezanos, y que, alcanza, por primera vez desde que se puso en marcha, a todas las enseñanzas obligatorias.
La Consejería de Educación entregará a las familias los primeros cheques-libro, por valor de 104 euros en el caso de Primaria, y 150 en Secundaria, a finales del mes de junio, siempre y cuando soliciten la ayuda antes del 31 de este mismo mes.
Una medida en la que Educación invertirá 6.712.531 euros, en colaboración con el Ministerio de Educación, que aporta 1.080.000 euros. Según recordó la consejera, a lo largo de estos cuatro años se ha ido incrementando paulatinamente el alumnado y, consecuentemente, la dotación económica, pasando de algo más de 8.600 estudiantes beneficiados a casi 48.000.
Díaz Tezanos explicó que con esta nueva fórmula aplicada al Plan de Gratuidad, la Consejería "perfecciona una de las políticas que más repercusión directa tiene en las familias", a la vez que cumple uno de sus objetivos prioritarios de garantizar una enseñanza obligatoria gratuita "en toda su dimensión y para todo el alumnado, superando así las posibles desigualdades".
BENEFICIOS DEL CHEQUE-LIBRO
La consejera señaló que el cheque-libro evita que las familias tengan que adelantar el dinero para la compra de libros y materiales, con el desembolso que eso suponía en una fecha concreta del año, al tiempo que simplifica el proceso y agiliza los trámites, ya que no es necesario, como hasta ahora, facilitar un numero de cuenta bancaria, ni presentar facturas, ni esperar a la resolución del proceso para recibir la ayuda.
Además, permite que las familias adelanten la compra de los libros al verano, evitando así las aglomeraciones de última hora y las colas en las librerías días antes del inicio de curso. También sirve para liberar a los centros educativos de un trabajo administrativo añadido, en un período "complicado" como es el de la escolarización.
Las solicitudes se presentarán en la secretaría del centro donde esté matriculado el alumno para el próximo curso. En el caso de los que comiencen Secundaria, la ayuda se deberá solicitar en el instituto donde se pida plaza.
Aunque el plazo estará abierto hasta el próximo 20 de noviembre, las familias que entreguen la instancia antes del 31 de mayo obtendrán su cheque-libro a finales del mes de junio.
Los cheques-libro se podrán canjear en todas las librerías o establecimientos autorizados para la venta de libros de texto que están acogidos al Plan de Gratuidad, que estarán identificados con un distintivo.
Cada cheque-libro tendrá un plazo de validez de cuatro meses y sólo se podrán cambiar por los textos y materiales necesarios para el proceso de aprendizaje, con lo que se garantiza que la ayuda se destine real e íntegramente a los alumnos beneficiarios. Junto a los cheques, las familias recibirán una guía sobre su uso.